Pero, en el detalle, las PASO mostraron el potencial de algunos candidatos vidalistas, la baja performance de varios funcionarios y el avance de algunos radicales tapados.
En Hurlingham, el municipio gobernado por Juan Zabaleta, peronista que jugó en Cumplir, de Florencio Randazzo, Cambiemos peleó cuerpo a cuerpo con Unidad Ciudadana las precandidaturas nacionales y bonaerenses, que perdió por poco margen, pero ganó cómodo en la nómina local.
Allí, el subsecretario de Asuntos Municipales de la Nación, Lucas Delfino, ganó la interna local contra Ramón Fernández (del sector de Jorge Macri), pero tuvo menos votos que su contrincante de UC, Martín Rodríguez Alberti, quien arrasó en su interna porque peleó contra una boleta corta.
Delfino, ex candidato a la intendencia del distrito, se planta ahora con una gran proyección para las generales, aunque precisará de todos los votos de Cambiemos.
En San Fernando el caso fue inverso, ya que Cambiemos ganó contra el intendente del Frente Renovador, Luis Andreotti, pero perdió en la nómina local, que lleva como cabeza de lista al subsecretario de Asuntos Municipales de la Provincia, Alex Campbell.
El funcionario de Vidal sufrió un fuerte corte de boleta de cinco puntos aproximados y deberá ahora rever la estrategia de cara a las generales.
Según indicaron a Letra P, la idea allí es apostar a la magra elección que realizó el frente 1País, con Sergio Massa como principal candidato. Y absorber a los votantes que decidan polarizar su voto.
En el caso de San Martín, otra de las comunas randazzistas, regenteada por Gabriel Katopodis, Cambiemos ganó en todos los cuerpos de la boleta, en una victoria en la que tuvo incidencia el ex candidato a la intendencia y actual diputado provincial Daniel Ivoskus, uno de los armadores locales. También, el ministro de Desarrollo Social bonaerense, Santiago López Medrano, quien ubicó al primer precandidato a concejal, Ramiro Alonso López.
En Ituzaingó, única comuna de la Primera sección donde sobrevive un caudillo del PJ, Alberto Descalzo, Cambiemos logró destronarlo.
Casi en una elección inversa a la de 2015, donde Descalzo ganó por poco margen, esta vez fue el oficialismo bonaerense el que venció, que en el orden local lleva a Gabriel Pozzuto como cabeza de la nómina.
El precandidato es el delegado de la Anses y un hombre cercano al intendente de Morón, Ramiro Tagliaferro, quien fue el encargado de armar la lista de unidad en el distrito.
Existieron también triunfos de Cambiemos que dieron paso a figuras del radicalismo. Es el caso de Mercedes, donde el intendente camporista, Juan Ustarroz, hizo una pésima elección y aunque ubicó a su hermano y hombre fuerte del gabinete, Gerónimo Ustarroz, como cabeza de la nómina local, no pudo evitar la victoria del médico radical José María “Sesón” Comesaña.
Igual situación se vivió en Navarro, donde el jefe comunal PJ K, Santiago Maggiotti perdió ante el oficialismo bonaerense. En el orden local, el ex intendente radical, Alfredo Castellani, además de ganarle al peronismo, le ganó la interna al precandidato del Pro, Omar Etchevery.
Pero estos logros territoriales tuvieron como contrapartida varias derrotas, difíciles de remontar en octubre.
En Escobar, el oficialismo provincial, que llevaba en lo local al presidente del bloque Cambiemos en el Deliberante, Leandro Costa, perdió en todos los niveles.
El joven edil es hijo del jefe del bloque de senadores de Cambiemos en el Senado, Roberto Costa.
En General Las Heras, donde gobierna el massista Javier Osuna, Cambiemos salió segundo, detrás de Unidad Ciudadana, pero tercero en la nómina local.
En José C Paz, tierra del peronista Mario Ishii (aliado a última hora de Unidad Ciudadana), el funcionario de Desarrollo Social y ex candidato a la intendencia Ezequiel Pazos perdió su apuesta local, que ganó en todos los órdenes el kirchnerismo.
En Moreno, no convenció la unidad lograda en cambiemos (Aníbal Asseff le cedió el lugar a su hermana Claudia, para que Leo Cóppola se integrara en segundo lugar) y unidad Ciudadana ganó en todos los órdenes.
En Malvinas Argentinas, Cambiemos cayó de forma aplastante contra el intendente peronista K, Leo Nardini, y el director de Juventud de la Provincia, Albi Czerni, perdió la pulseada interna contra Máximo Cariglino (hijo del senador provincial Roque Cariglino).
También, en Tigre, tierra massista, el precandidato local de Cambiemos, el concejal Pedro Segundo Cernadas (ahijado de Patricia Bullrich) perdió por amplio margen.
En la Tercera sección, rodeado de intendencias peronistas, Cambiemos logró más derrotas que victorias.
De sus jefaturas comunales, solo ganó en la comuna de Lanús, con el ultra PRO Néstor Grindetti; en las radicales de Magdalena con Gonzalo Peluso y en Lobos con Jorge Etcheverry.
En Quilmes, el macrista Martiniano Molina perdió en todos los niveles, al igual que el radical Mauricio Gómez, de San Vicente. En Berisso, Jorge Nedela (UCR) también sufrió una derrota, y en Brandsen, Cambiemos logró ganar pero su jefe comunal, Daniel Cappelletti (UCR), perdió en lo local.
En cuanto a las intendencias PJ, Cambiemos solo pudo festejar en Punta Indio, una comuna gobernada por el ultra K Hernán Yzurieta.
Allí ganó en todos los órdenes y se proyecta el ex intendente radical, Héctor Equiza, cabeza de la nómina local.
En el Esteban Echeverría, el titular de Tierras, Urbanismo y Vivienda bonaerense, Evert Van Tooren, fue derrotado, al igual que el subsecretario de Fortalecimiento Familiar y Comunitario, Gabriel Mércuri, quien encabezó la nómina de concejales en Lomas de Zamora.
En Florencio Varela, tierra del histórico intendente peronista Julio Pereyra, Cambiemos perdió, aunque en la interna se posicionó Pablo Alanis, hombre cercano a Marcos Peña, quien le ganó por amplio margén al concejal ex massista Dardo Ottonello.
Desde el oficialismo, remarcan que la polarización de la elección puede ayudarlos a definir el voto de sectores como 1País, con un electorado más cercano a Cambiemos, y hasta imaginan que pueden sumar algunos puntos del Frente Justicialista Cumplir.
Según creen, las internas suelen alentar un voto más experimental, que puede haberse inclinado por la figura del ex ministro Florencio Randazzo. Pero en octubre, especulan, se podría volcar hacia el oficialismo.