Tras una partida polémica que dio lugar a casi seis meses de silencio, la ex titular de Aerolíneas Argentinas, Isela Costantini, reveló que no se fue por decisión propia, sino que fue apartada del cargo, y reconoció las diferencias con el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, que en varias oportunidades habló de una salida “acordada”.
“Yo no me fui, eso es importante. Mucho se habló y no quise salir a hablar. Fue una decisión de mi jefe”, confesó Costantini en una entrevista concedida a La Nación+, y agregó: “Teníamos backgrounds diferentes y eso va generando un desgaste y un quiebre de confianza”.
La ex funcionaria admitió que “fue un momento difícil”, hasta “un choque frontal”, ya que los resultados de su gestión “habían sido muy buenos”, pero explicó: “Yo tenía una forma muy diferente a la que tenía mi jefe a la hora de enfrentar un problema, a cómo manejarlo, y eso genera un desgaste”.
“Es doloroso, sentí que me quedaba debiéndoles algo a todo el equipo de Aerolíneas. Siento que le dejé algo importante a cada uno y eso es que son capaces de llevar la empresa adelante. Fue una sensación de dolor, de desgarro”, expresó, visiblemente emocionada.
Costantini señaló en este sentido que su “desafío” era “convertir la empresa, sanearla y ser reconocidos a nivel internacional, que realmente tuviera su espacio a nivel global”, y dijo haber recibido numerosos mensajes de agradecimiento por parte de empleados de la compañía y ciudadanos.
“Di todo lo que podía de mí misma. Creo que Aerolíneas es una empresa viable. Dentro de todos los logros, habíamos logrado la credibilidad”, concluyó, en la entrevista que mantuvo con el periodista José Del Río.
Aduciendo “motivos personales”, Costantini dejó la conducción de la aerolínea de bandera el 21 de diciembre pasado –su gestión no llegó a cumplimentar el año- y fue reemplazada por Mario Dell'Acqua, quien estaba al mando de Intercargo.
Para ese entonces, las diferencias con Dietrich y el secretario de Coordinación de Políticas Públicas, Gustavo Lopetegui -ex CEO de LAN Argentina- eran un secreto a voces: Constantini se resistía a aplicar el ajuste promovido por el Gobierno, y la presión del ministro para forzar el ingreso de aerolíneas de bajo costo, más conocidas como low cost, fue el detonante del retiro de la funcionaria.