Furia en el sur

La Iglesia intercede y frena la represión en Neuquén

El Obispo será el intermediario entre el Gobierno y los gremios. Habrá reunión el próximo lunes para encontrar una salida pacífica.

Lo que era otra jornada violenta, en la que la Policía de Neuquén reprimió a representantes del gremio ATE, y se complicaba un poco más el entendimiento del Gobierno provincial con los sindicatos, surgió un llamado que buscará unir las partes y frenar la represión. Tras el accionar de los efectivos que se desplegó en el Centro Administrativo Ministerial (CAM), se convocó para el lunes a una reunión en la sede del Obispado. En un breve comunicado, el obispo Fernando Croxatto se ofreció de garante -ante el nulo gesto de la provincia- para que se "alance paz social".

 

"Confiamos que la finalización de este conflicto -advirtió el religioso- ha de ser voluntad de ambas partes". Acompañada de la firma del Defensor del Pueblo neuquino, Ricardo Riva, la misiva le dio una garantía a los estatales que no dejaron de culpar a Gutiérrez por la violencia desatada en las calles.

 

“Si Omar Gutiérrez no se sienta a dialogar va a tener que dar asueto todos los días porque seguiremos manifestándonos contra el ajuste que Macri le ordenó hacer en la provincia contra los trabajadores”, decía  principios de este viernes el secretario general de ATE, Carlos Quintriqueo.

 

“Aquí no estamos hablando de un conflicto gremial, estamos hablando de actos de vandalismo, de violencia, coerción, contra bienes del pueblo, contra trabajadores del Estado, incluso cuyas consecuencias llegan mucho más allá y afectan a terceros, en este caso el de la ciudadanía que vive en los alrededores de este centro administrativo”, dijo el subsecretario de Seguridad, Gustavo Pereyra, y reiteró que “la intervención policial fue al solo efecto de garantizar la integridad física de los trabajadores del CAM”.

 

 

 

REPRESIÓN. Como informó Letra P, las últimas 48 horas fueron complicadas. Entre corridas, piedrazos y balazos de goma, los neuquinos tuvieron que evitar el centro (allí está ubicada la Gobernación) por los serios incidentes que opacaron la doble jornada que unificó al Movimiento Popular Neuquino (MPN) y a Cambiemos en sus críticas. "Quieren desestabilizar el orden político en Neuquén y en estos casos será clave la acción de la justica que más allá de que ayer hubo esfuerzos por mediar la situación, se espera que tomen cartas en el asunto y adquieran mayor protagonismo", advirtió el diputado oficialista provincial Pablo Bongiovani. El secretario de Economía y Hacienda de la Municipalidad de Neuquén, José Luis Artaza, quien está alineado a Cambiemos -bajo el mando del intendente Horacio “Pechi” Quiroga- ratificó en diálogo con AM550 (La Primera) su “preocupación” por el accionar sindical en la provincia.

 

 

 

Con diferencia, un peso pesado como el senador nacional Guillermo Pereyra, consultado por la situación en la capital provincial, le pidió al gobernador Omar Gutiérrez que convoque “al diálogo” para frenar el nivel de violencia que aumenta con el paso de las horas. Sin evitar las críticas a los gremios más duros, el conductor del Sindicato Petrolero advirtió: “Omar Gutiérrez tiene que abrirse. Lo veo muy cerrado. Tiene que convocar al diálogo”.

 

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