Las cifras en debate

Para la UCA, Macri podría llegar a la campaña 2017 con cuatro puntos menos de pobreza

“Si rebota la economía”, le aclaró a Letra P Agustín Salvia, director del Observatorio Social. Para el massismo, bajarla es una deuda de la democracia. Capitanich: “Un tercio es de Macri”.

La publicación de cifras oficiales de pobreza luego de tres años sin números disparó una serie de debates que, lejos de cumplir con la meta que el Gobierno se impuso de clausurar las discusiones, abrió un frente de elucubraciones y posiciones encontradas sobre la cuestión de fondo. El 32,2% de pobres que reflejó el Indec PRO se alcanzó con una metodología bastante diferente a la que utiliza la Universidad Católica Argentina (UCA), pero ambas mediciones dieron un número bastante similar. Agustín Salvia, jefe del Observatorio de la Deuda Social de esa casa de estudios, arrancó el año 2016 cuestionando fuertemente el impacto de las políticas del macrismo en el empeoramiento de los niveles de pobreza e indigencia que dejó el kirchnerismo. En diálogo con Letra P, aseguró que “ahora que están los números, se vienen desafíos muy fuertes para la política” y, consultado respecto a la perspectiva de las próximas mediciones, se animó al pronóstico: “Si la economía mejora y rebota, puede ser que en el semestre anterior a las elecciones de 2017 la pobreza baje entre dos y cuatro puntos”.

 

El especialista aclaró que “ya sólo con bajar la inflación se puede notar una mejora, pero, así y todo, de lograrse, estaríamos llegando a un 26-27% de pobres, el piso que tenía el kirchnerismo en el año 2007”.

 

Ese período al que refiere Salvia fue el último con cifras convincentes. La del 2013, previa a la intervención del Indec, arrojó un 5% de pobres, posición que en su momento y en voz baja generó tensiones en el Gobierno. “De ahí en más, de ese 26%, se acabó el viento de cola y hay que empezar a pensar en políticas concretas”, destacó el hombre de la UCA.

 

De todos modos, si el pronóstico es acertado, llegaría justo en los albores de la mayor batalla de Cambiemos en el corto plazo: arribar a las legislativas bonaerenses con un clima socio económico menos crítico que el actual, porque las encuestas prematuras que manejan los partidos muestran que aún hoy el voto está muy relacionado con la situación económica de las familias, más que nada en los sectores medios. Hoy en día, la extensión de la recesión y la crisis actuales hacia el año que viene es el temor más grande de todo el arco de la alianza de gobierno.

 

La visión del tema es polifocal. “Un tercio de la pobreza actual es clara responsabilidad de este gobierno de Macri”, dijo el jefe de Gabinete de Cristina Fernández de Kirchner y actual intendente de Resistencia, Jorge Milton Capitanich. En declaraciones al programa radial Entretiempo, el chaqueño explicó que “se duplicó la tasa de inflación y hubo una devaluación fuerte, lo que muestra que la macroeconomía aumentó la pobreza”. Y hasta se animó a especular con que “el Gobierno buscó un piso alto para mostrar que luego habrá una mejora; hoy hay una foto para defender la película”.

 

Además, reivindicó la política de la administración K. “Durante nuestro gobierno, incluso en la peor de las hipótesis, se bajó la pobreza a la mitad y mejoraron todos los índices de desarrollo humano”, enumeró.

 

Para Aldo Pignanelli, economista del Frente Renovador, esa teoría del índice alto adrede “no existe, es un invento”. El referente del equipo de asesores económicos de Sergio Massa fue incluso más allá: “Acá el problema no es si es culpa de Macri o de Cristina. Antes de la dictadura militar, la pobreza en Argentina era del 5%. Vino el golpe del 76, la subió a niveles récord y después la democracia nunca pudo resolver el tema. Es una deuda de todos los gobiernos democráticos”, señaló.

 

@leandrorenou

 

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