Los legisladores porteños del Frente para la Victoria reclamaron una audiencia con el ministro de Justicia y Seguridad, Martín Ocampo, para que se habilite la creación de una Comisión Especial sobre el traspaso de parte de la Policía Federal a la órbita de la Ciudad y entraron en pie de guerra con el PRO.
El bloque mayoritario del Parlamento porteño asegura que la comisión en cuestión “no es necesaria” y le reprocha a sus pares que “no piden información”. Sin embargo, el FpV ha presentado pedidos de informes y suele cuestionar el estado del proceso de la transferencia que, según el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli, está en “la fase final”.
En el oficialismo argumentan que las dudas que plantea el kirchnerismo sobre el estado actual del proceso de transferencia de competencias se pueden erradicar con la adaptación de un “temario específico” dentro de la Comisión de Seguridad de la Legislatura porteña y no tendría sentido la formación un cuerpo especializado porque este tipo de comisiones no tienen capacidad para despachar iniciativas parlamentarias.
“No podemos crear comisiones todo el tiempo porque no sirve. Tampoco fomentar una subcomisión, que sería un disparate. Esto se discute en Seguridad”, advierte un diputado macrista. El mismo legislador indicó que cuando se discutió la llegada del metrobus a la Capital Federal se trabajó puntualmente sobre ese tema en el marco de la Comisión de Tránsito y Transporte sin necesidad de formar un nuevo cuerpo.
En la primera reunión del cuerpo, el titular de la Comisión de Seguridad, Juan Pablo Arenaza, les ofreció a los legisladores opositores diseñar un temario “exclusivo” sobre la transferencia y que sea puesto en debate cuando todos acuerden.
A esa altura, la posibilidad de la Comisión Especial sobre el traspaso ya había fenecido. La negociación para que ese cuerpo tenga vida tuvo como protagonistas a las bancadas del PRO y del Frente para la Victoria. Conocedor de la interna kirchnerista, el macrismo condicionó la formación de ese cuerpo específico a la aprobación de todo el bloque del FpV del acuerdo suscripto entre Mauricio Macri y Horacio Rodríguez Larreta para traspasar parte de la Policía Federal al terreno porteño.
Casualmente, la sesión especial del 18 de enero abrió el camino para una complicada relación entre los diputados kirchneristas. Antes de bajar al recinto, los 12 ediles se congregaron en el despacho del presidente de la bancada, Carlos Alfonso Tomada. Uno a uno dijeron su posición, por más que ya se sabía de antemano cómo quería votar cada uno. No obstante, la sorpresa la dio el ex ministro de Trabajo, que comunicó que prefería abstenerse.
Parte del bloque le había asegurado al oficialismo que convalidaría positivamente el traspaso, pero los legisladores vinculados a La Cámpora y Nuevo Encuentro no estaban a favor. Cuando avisaron que votarían negativo, sus compañeros estallaron. “Es una locura, nos ponemos a los porteños en contra ante un tema sensible como la Seguridad”, fustigó después de la sesión un miembro del sector que pedía votar positivamente el acta acuerdo. Ese malestar, que se ocultó en el recinto, fue la antesala del escenario en el que vive la bancada actualmente. “Llegamos a la situación de discutir y enojarnos por una simple declaración de personalidad destacada”, analizó un legislador del FpV.
El PRO no perdona lo que considera un “acuerdo roto” y decidió no habilitar la creación del cuerpo específico. También, existe otra discusión que tiene que ver con la conformación de la Comisión de Seguridad. “Los que quedaron afuera de Seguridad ahora piden ingresar al tema a través de la Comisión Especial. Todos los bloques estamos representados ahí”, marcó, furiosa, una diputada que integra el cuerpo en el que el PRO tiene mayoría. De 13 miembros, siete son de la bancada amarilla.
“El PRO lo negoció con el FpV pero el kirchnerismo no cumplió con votar la ley. A llorar al campito”, bramó, ofendida, una legisladora.
A mitad del mes de febrero la Legislatura se convirtió en un hervidero por la discusión sobre la conformación de las comisiones, que cada año obliga a suspender las vacaciones de los diputados para pelear lugares en los cuerpos parlamentarios. Por el debate futuro sobre el traspaso de la Federal, representantes de la oposición y el oficialismo hacían cola para integrar Seguridad.
Es prioritario marcar que no sólo el FpV exige un cuerpo único para discutir el traspaso que, el ocho de mayo, luego de casi tres meses de su aprobación, fue oficializado mediante la firma del acuerdo entre Ocampo y su par nacional, Patricia Bullrich, que cosecha cuestionamientos en la Jefatura de Gobierno por “prometer una cosa y traspasar otra”.
El socialista Roy Cortina y Graciela Ocaña (Confianza Pública) también se sumaron al reclamo del cuerpo especial. En tanto, el FpV denuncia falta de información y “colaboración” pero en el macrismo dicen que “no la piden”.
“El 18 de enero se aprobó el traspaso y recién ahora presentan informes y piden la Comisión Especial. Quieren hacer show”, sostuvo un edil PRO.