Con el objetivo de participar de una reunión de gabinete ampliado del gobierno bonaerense de María Eugenia Vidal, el presidente Mauricio Macri desembarcó en la Gobernación en el marco de un fuerte e inusual operativo de seguridad que se apostó desde las primeras horas de la mañana de este lunes y a partir del cual, tanto las inmediaciones como el interior de la sede gubernamental provincial, se vieron pobladas de efectivos policiales con sus respectivos perros, reforzándose la guardia con el correr de las horas y afectando también la labor periodística en el lugar.
Respecto a esto último, los trabajadores de prensa acreditados en la Gobernación bonaerense se vieron impedidos de realizar sus tareas a raíz de una estricta orden impartida por la Nación de bloquear el acceso de periodistas a las inmediaciones del Salón Dorado, donde se realiza por estos momentos el encuentro entre Macri, Vidal y funcionarios de primera y segunda línea de la administración pública provincial.
Por esta razón, los periodistas fueron aislados en el Salón de Usos Múltiples, el punto más alejado del Salón Dorado dentro de la Gobernación, con la promesa de que, tras el encuentro, algunos ministros se acercarán al lugar para realizar declaraciones. Sin embargo, Macri y Vidal partieron raudamente del salón para dirigirse hacia Esteban Echeverría, donde inauguraron un hospital. Al finalizar el encuentro, Letra P captó la salida del jefe de Estado, en medio de un sistemático intento de la guardia presidencial por bloquear la labor periodística.