Desde Lobos más de 40 intendentes del peronismo se juntaron para mostrarle al Gobierno una foto de unidad como la que no se había conseguido durante todo este año. Uno de los temas que se trató en el encuentro del martes fue el Presupuesto y endeudamiento para el 2017 y los intendentes coincidieron en que los legisladores debían discutir en unidad.
“Siempre bregamos porque nunca nos separáramos, las circunstancias se dieron así”, le explicó a Letra P la diputada del bloque del Frente para la Victoria, Rocío Giaccone.
La legisladora fue una de las que quedó al mando de la bancada luego de la salida de José Ottavis de la presidencia del espacio. Aún sigue reportando al camporista y consultada por este medio sobre la reunión de Lobos y el llamado de los intendentes aseguró: “yo espero, y seguimos trabajando, para una unidad sobre todo porque tenemos una unidad de ideas”.
Actualmente en ambas Cámaras –Senado y Diputados- hay tres bloques peronistas/kirchneristas desprendidos del original Frente para la Victoria y en caso de que al menos voten de la misma manera, Cambiemos debería incluirlos en la negociación para tener los dos tercios y conseguir el endeudamiento estipulado en 84 mil millones de pesos y 59.950 millones de dólares. Los legisladores empiezan a mostrar señales de unidad en ese sentido, pero la votación de forma igual entre los tres bloques aún no está asegurada.
Giaccone además agregó que “siempre se habla –entre los bloques- con todos los proyectos y más aún con el Presupuesto”.
El año pasado en la cámara de Diputados, a donde se definió la votación, el bloque del Frente para la Victoria terminó votando dividido. Los legisladores de La Cámpora y más alineados con la figura de Cristina Fernández de Kirchner, terminaron votando el Presupuesto 2016 pero rechazando el pedido de deuda. Habían sido 15 legisladores. Otros 20 diputados, empujados por buena parte de los intendentes, votaron presupuesto y endeudamiento, lo que le permitió a María Eugenia Vidal salir a tomar deuda para la Provincia. Esa votación terminó partiendo los bloques.
Sin embargo, el paso del tiempo y la decisión de los intendentes de tener una posición en conjunto parece que empieza a injerir en la Legislatura. Consultado por Letra P, el presidente del bloque del Frente para la Victoria-PJ, Walter Abarca, remarcó que “estamos trabajando para tener unidad. Lo de los Intendentes nos ayuda mucho”.
Además adelanto que se va a “recrear un espacio de discusión entre los 50 Intendentes y todos los legisladores”.
“El peronismo de la provincia de Buenos Aires tendrá una posición única frente al gobierno de Vidal”, se animó a soltar el ex secretario de Néstor Kirchner.
De igual manera opinó la presidenta del otro bloque peronista, del Peronismo para la Victoria, Graciela Rego. La diputada le dijo a Letra P que “nosotros estamos hablando e intentando votar un presupuesto acordado por los tres bloques”.
Además la legisladora mandó una señal al oficialismo. “Para los dos tercios necesitan un acuerdo también nuestro, sino no lo pueden sacar”, dijo y anticipó que “la idea es poder saldar las diferencias que tengamos saldarlas antes del Presupuesto”.
MANOS. En un escenario de votación conjunta el peronismo/kirchnerismo recluta 36 bancas. Cambiemos que tiene 28 más las 20 que le da el Frente Renovador, las 4 del GEN y las 2 del Justicialismo Bonaerense se acerca a los 55 votos. Para conseguir el endeudamiento necesita de 61 manos. La izquierda votará se opondrá al pedido de deuda y la diputada Mónica López podría plegarse a la estrategia de los intendentes: participó de las últimas actividades del Grupo Esmeralda.
Con una unidad del peronismo, el oficialismo empezaría a acceder a las propuestas de la oposición para conseguir el acompañamiento. En este contexto uno de las preocupaciones de los intendentes son los fondos girados para Seguridad.
El año pasado, la negociación resultó extenuante pero positiva tanto para los intendentes como para Vidal. El ejecutivo consiguió el endeudamiento (aunque en un número menor al planeado) y los jefes comunales lograron agregar un fondo de 10 mil millones de transferencia a los municipios para Obras e Infraestructuras (7 mil millones) y Seguridad (3 mil millones). En el proyecto girado al Senado no aparece el fondo de Seguridad.
