El diputado nacional y presidente de la Cámara, Julián Domínguez, será el otro precandidato a la gobernación bonaerense dentro del Frente para la Victoria y estará acompañado por el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza.
El matancero estuvo al filo de directamente declinar su candidatura en el día de ayer. Es que ante el anunció de Aníbal Fernández que llevaría a Martín Sabbatella como compañero de fórmula y la negativa de Sergio Berni de acompañarlo se vio encerrado. Ayer a la noche se reunió durante 40 minutos con Julián Domínguez en la oficina del presidente de la Cámara de Diputados. Intentaron llegar a un acuerdo, sin embargo nadie quería ser segundo.
Espinoza presionó con la cantidad de votos que tiene asegurados en su distrito, La Matanza, y con unos 23 municipios que lo apoyan. También coqueteó con la posibilidad de llevar al senador Juan Manuel Abal Medina como vice. El ex jefe de Gabinete ya había dado su aprobación. Domínguez se reunió anoche a última hora con Berni. Intentaron llegar a un acuerdo.
Presionado por los intendentes, el titular del PJ bonaerense, tuvo que dar el brazo el torcer. Una pista la dio esta mañana el jefe comunal de Tres de Febrero, Hugo Curto. En declaraciones radiales antes de que se filtrara la información dijo que la fórmula sería Domínguez-Espinoza.
El matancero sufrió una gran presión de los barones del conurbano anoche. Por su parte, Domínguez Se espera que en la tarde de hoy, el intendente de La Matanza y ahora precandidato a vicegoberandor, de una confernecia de prensa en San Justo para detallar cómo fue que se bajó de la precandidatura a la sucesión de Daniel Sicioli. Será en un bar; el mismo a donde se presentó en el 2007 la fórmula Scioli-Alberto Balestrini.
Desde que Julián Domínguez bajó a la Provincia reclutó el apoyo explícito de algunos intendentes. El dominguismo asegura que tiene un listado con más de 40 jefes comunales que se inclinan por la figura del chacabuquense. También tuvo un fuerte acompañamiento del sindicalismo bonaernese.
En su aventura electoral, Espinoza, había conseguido penetrar en algunos intendentes que le manifestaron su respaldo, como Alberto Descalzo, Darío Díaz Pérez o Raúl Othaecehé. También el de Martín Insaurralde. Con ese apoyo el titular del PJ se envalentonó y escudó hasta donde pudo.
Aníbal Fernández-Martín Sabbatella por un lado y Julián Domínguez-Fernando Espinoza por el otro son las alternativas que ofrece el Frente para la Victoria en la nómina de gobernadores para las PASO del 9 de agosto. Será la primera vez que el kirchnerismo efectivamente compita en una interna desde que se instauraron las Primarias Abiertas Simultaneas y Obligatorias.