El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, pensó que con las declaraciones de su poderoso secretario de Gobierno, Marcos Peña, alcanzaría para que el electorado porteño entienda que el candidato que quiere la mesa chica del PRO para la Jefatura de Gobierno es Horacio Rodríguez Larreta.
No obstante, el pasado fin de semana, durante el programa televisivo de Mirtha Legrand, decidió seguir en ese eje y castigó duro a Gabriela Michetti sobre quien dijo que “fue por el proyecto nacional”. Anteriormente, Peña dialogó con Clarín y sostuvo: “Voy a votar a Horacio Rodríguez Larreta”. Además, aclaró que “representa la continuidad natural” y es “clave para sostener el equipo y para haber logrado las transformaciones que hicimos”.
La embestida de la mesa chica del PRO hacia Michetti tiene dos razones que se estudian hacia dentro del macrismo. Por un lado, como siempre manifestaron, quieren a la senadora como parte de la fórmula presidencial del espacio; precisamente, como vicepresidenta.
Esto tiene lógica si se tiene en cuenta que Durán Barba y Peña siempre impulsaron la idea de la “tercer vía” y la posibilidad de competir en las elecciones nacionales con una fórmula “PRO pura”. Entonces, por esa cuestión, quieren que Michetti se baje de la pelea porteña.
Por otro lado, el mismo grupo sabe que si bien Horacio Rodríguez Larreta tiene mucho consenso hacia dentro del PRO, no cuenta con esa ventaja política hacia afuera.
A pesar de que el larretismo asegure subterráneamente que el Jefe de Gabinete está mejor posicionado en las encuestas que la ex vicejefa y que nadie como él representa mejor el espíritu del macrismo, lo cierto es que los números reales indican otra cosa.
En el riñón de Rodríguez Larreta hablan de un virtual “empate técnico” entre ambos precandidatos, a pesar de que Michetti nunca perdió una elección y en 2013 arañó el 40 por ciento de los votos en Capital Federal.
Además, en el PRO están desesperados porque no terminan de entender las aspiraciones de la senadora nacional que mejor intención de voto e imagen tiene en el distrito que ese partido gobierna desde 2007.
Incluso hay quienes temen que persista en su idea de competir en la Ciudad, gane la interna y hasta forje un acuerdo con los referentes de UNEN que dejaría virtualmente fuera del escenario a Rodríguez Larreta y su tropa.
Ante este panorama, en el PRO aseguran que el Jefe de Gabinete repite insistentemente que “Mauricio ya decidió” y que “nosotros somos el macrismo”. En ese esquema, para Rodríguez Larreta “los demás son traidores”.