Por un lado, que ya se cumplieron todos los trámites y condiciones precedentes para que en un plazo máximo de 45 días se emitan oficialmente las pólizas que aseguran el crédito de US$ 4.714 millones que un pool de bancos chinos le otorgó al país para la construcción de las represas patagónicas.
Y por el otro, que antes de empezar a recibir las primeras partidas de la línea crediticia, Argentina deberá girarle a China un suma de US$ 200 millones por los gastos bancarios iniciales y la cancelación parcial de los seguros.
Tras las reuniones que mantuvieron con la delegación del Sinosure, las autoridades de Economía, Planificación y el Banco Central salieron convencidos de que ahora sí se ha iniciado la cuenta regresiva definitiva para liberar los fondos destinados a las obras de las usinas “Néstor Kirchner y Jorge Cepernic” .
Según el nuevo cronograma que manejan los funcionarios y los representantes del consorcio constructor que integran el grupo chino Gezhouba y la local Electroingeniería, a mediados de diciembre se enviará el pedido oficial para el primer desembolso del préstamo que estará en torno de los US$ 230 millones.
El banco ICBC –que lidera el esquema de financiamiento– deberá depositar los fondos antes del 15 de enero de 2015, momento a partir del cual comenzará a correr el tiempo previsto de 66 meses para la ejecución de las obras.
Si se cumplen los plazos en juego dentro de ocho meses, cuando la campaña electoral se encuentre al rojo vivo, el grupo adjudicatario deberá convocar a una “audiencia pública” para exponer y defender el “Estudio Integral del Impacto Ambiental” de la obra.
Paralelamente, la administración provincial de Daniel Peralta tiene que llevar adelante una tarea clave: la expropiación y liberación de 47.000 hectáreas en las tierras aledañas al río Santa Cruz.
Para la dirección técnica y ejecutiva del proyecto, Electroingeniería –la empresa nacida en Córdoba que conducen los empresarios K, Gerardo Ferreyra y Osvaldo Acosta–contrató a uno de los profesionales que más experiencia tiene en centrales hidroeléctricas a nivel mundial. Se trata del ingeniero italiano, Gianfranco Rizzo, quien tuvo una destacada participación en las obras de las usinas de Salto Grande, Alicurá, Piedra del Águila y Yacyretá.
Tras haber sido adjudicada en el segundo semestre del año pasado, la megaobra de las centrales hidroeléctricas Condor Cliff y La Barrancosa –que fueron rebautizadas por el Gobierno con los nombres de “Néstor Kirchner y Jorge Cepernic” – tuvo el espaldarazo final que le faltaba durante la visita oficial que realizara en julio a Buenos Aires el presidente de China, Xi Jimping.
Luego de varios meses de negociaciones, el Gobierno suscribió con un pool de bancos chinos el financiamiento récord de US$ 4.714 millones para afrontar la construcción de las obras y la provisión de las turbinas y los equipos de generación.
El crédito fue otorgado a 15 de años de plazo, con un período de gracia de 5 años y medio (el tiempo de construcción de las represas) y una tasa de interés anual del orden del 7,5%.
Según los datos oficiales, el 76% del crédito será remitido a la Argentina en concepto de certificaciones de obras y el 24% restante permanecerá en cuentas orientales que actuarán como agentes de pago de los proveedores de maquinarias y otros bienes de capital.
Cuando estén terminadas, las usinas aportarán 1.740MW de capacidad de generación al sistema eléctrico nacional que representa algo más del 7% de la demanda máxima actual.