La obra estará frenada hasta que Monsanto complete los estudios de impacto ambiental y se realice una audiencia pública. Por su parte la municipalidad de Malvinas Argentinas deberá abstenerse de emitir algún tipo de autorización a la empresa.
“Tenemos el dictamen de la sentencia, por el que la Cámara ha resuelto suspender los efectos de la ordenanza que autorizaba la obra civil, por ende la obra de Monsanto debe ser paralizada”, aseguró Gastón Mazzalay, integrante de la organización ambientalista Malvinas Lucha por la Vida.
Los vecinos y ambientalistas mantiene un acampe frente a la fábrica desde el 18 de septiembre pasado, para impedir el ingreso de de camiones con materiales para construir la secadora de semillas de maíz más grande del mundo.
Al conocer el fallo la compañía manifestó mediante un comunicado que “no comparte la resolución judicial de suspender la continuidad de la obra hasta la obtención del estudio de impacto ambiental. Sin embargo, Monsanto es respetuosa de las decisiones del Poder Judicial y acatará como siempre sus medidas”.
“Asimismo, Monsanto confirma que apelará dicha sentencia ante el Tribunal Superior de Justicia, dado que considera legítimo su derecho a construir la planta al haber dado cumplimiento con todos los requisitos legales y haber obtenido las autorizaciones para ello conforme la normativa vigente, lo que fuera confirmado por sentencia del Juzgado de Primera Instancia de fecha 7 de octubre de 2013″.
“Monsanto desea aclarar además que ya ha presentado el Estudio de Impacto Ambiental, documento que está en proceso de evaluación por parte de la Secretaría de Ambiente de la Provincia”, concluyó.