El escrito afirma que “desde que asumió su cargo en el juzgado federal, el juez Rafecas ha demostrado un férreo compromiso con el impulso del proceso de Verdad y Justicia por los crímenes del terrorismo de Estado. Desde su juzgado cumplió un papel clave para impulsar y desarrollar estrategias de investigación y ordenamiento de los procesos judiciales que avanzaban en forma muy desordenada y despareja en la Justicia Federal del país a partir de la declaración de inconstitucionalidad de las leyes de obediencia debida y punto final en 2005”.
Además “su desempeño como juez federal ha sido fundamental para el avance de causas centrales en la política de Derechos Humanos desplegada en el país desde 2003. El juez está a cargo de la investigación de la Megacausa Primer Cuerpo del Ejército, en la cual se investigan crímenes cometidos contra más de 1200 víctimas en numerosos centros clandestinos de detención (CCD) en la Capital Federal y la Provincia de Buenos Aires”.
“El otro aporte importante de Daniel E. Rafecas al proceso de Verdad y Justicia en la Argentina ha sido la incorporación de un concepto amplio de tortura que comprende todos los padecimientos sufridos por los secuestrados en los CCD, en consonancia con lo dispuesto en la Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura. La mirada innovadora de Rafecas permitió considerar como delito de tortura las vivencias del cautiverio que exceden de la aplicación de golpes o picana eléctrica, aportando no solo a la persecución penal sino al conocimiento histórico y social de lo sucedido al interior de los CCD durante el periodo más trágico de nuestro país”, asegura la nota.
Para finalizar resalta que “la preocupación que nos mueve es el avance de este proceso disciplinario contra uno de los mejores jueces de la Democracia, comprometido con la causa de los Derechos Humanos y con la reparación adecuada a las víctimas de la última dictadura cívico militar”.