Entre los principales problemas que presenta la autovía, se encuentran el pavimento hundido, pozos en ambos tramos, desniveles, basura en el separador de carriles y animales sueltos. Los reclamos son realizados por usuarios y algunos legisladores llevaron el caso a la Justicia, con informes a la Suprema Corte sobre el estado de la autovía y la exigencia de la concreción de distintas obras.
Los automovilistas que sufrieron accidentes, denunciaron que la falta de mantenimiento en la autopista provoca daños materiales y puede generar fatalidades a futuro.
Desde Coviares, omitieron problemas puntuales y anunciaron que “el contrato de la autopista está en un proceso de readecuación desde la emergencia declarada en el año 2002 a la fecha”.
En un comunicado, la empresa sostuvo que “recientemente esa responsabilidad ha sido transferida de la Nación a la Provincia, ese proceso de readecuación es complejo y debe contemplar diferentes variables. Por lo cual las autoridades de la Provincia necesitan tiempo para implementar la solución contractual ajustada a derecho que contemple el mejor interés de los usuarios”.
El tema del costo de los peajes, en relación al estado de la autovía, es otro punto dentro de los reclamos. Sin embargo, Coviares se excusó y dijo que hasta que la Provincia se adecue a la transferencia, “las tarifas aplicadas son provisorias y ellas están ligadas directamente a la operación y mantenimiento”, que son 3,50 pesos en “hora normal” y 5 pesos en “hora pico” para automóviles.