Finalmente, Falcioni sigue en Boca. Tras reunirse durante toda la noche de ayer con el presidente Daniel Angelici, el DT recibió el respaldo dirigencial y continuará dirigiendo a Boca, a pesar de lo que pasó y que indudablemente está debilitado frente al plantel.
Es innegable e inocultable -por más que los protagonistas se empecinen en hacerlo- lo que ocurrió en el vestuario luego del partido en Venezuela. Hubo testigos que escucharon los gritos y reproches entre Falcioni, Riquelme y Cvitanich. A raíz de eso, el técnico renunció, pero no se la aceptaron. Entonces, durante toda la jornada de ayer se vivieron reuniones maratónicas entre él y los dirigentes, hasta que cerca de la medianoche se conoció la noticia de la continuidad.
Así las cosas, parece que no pasó nada. Habrá que ver hasta cuándo aguanta Falcioni esta situación. Es un DT grande, con mucha experiencia, que teóricamente tiene más poder que los jugadores -incluso las estrellas- para tomar decisiones y elegir quién juega, quién no, cómo juega y cómo no. Pero bien… ¿en Boca es tan así?