Esa nueva era no habla del fin del mundo sino de un cambio en la matriz de pensamiento humano, en contacto con el universo y con los seres; por eso aquellas personas conflictivas, egoístas y negativas no tendrán lugar y lentamente irán dejando de formar parte de la sociedad. Quizá, también, nada de esto pase. Es creer o no, simple.
Pero de cataclismos y tormentas amanece un nuevo orden y eso parece avecinarse en el bloque del Frente Para la Victoria en la Cámara de Senadores; el cual por estos días pasa su momento más tormentoso. Por un lado Cristina Fioramonti, Presidenta del Bloque que pide la expulsión del espacio legislativo a su par María Ehcosor de Acuña por los dichos que ésta tuvo contra el Gobierno Nacional durante la última sesión legislativa cuando se votaba el traspaso de la Autopista La Plata-Buenos Aires a la órbita provincial.
A esta tensa situación se le suma los que están de un lado o del otro, lo más cristinistas o lo más sciolistas. El conflicto Fioramonti-Ehocosor puso de un bando a Martini, Muntaner, Dichicara y varios más que sostienen la conducción de Cristina Kirchner como máxima. Casi lo que sería en la vereda de enfrente respaldando a la mujer del intendente de Hurlingam Luis Acuña asoman los legisladores de La Juan Domingo.
Pero las tormentas no se iniciaron esta semana; desde principio de año los cortocircuitos y enojos entre los integrantes del Frente Para La Victoria tienen sus matices al punto que han llegado a tocar por momentos a la propia familia de Cristina Kirchner.
El enojo de las Fernández con Oliva
Es que fue al inicio del año legislativo cuando el Senador por la Región Capital Gustavo Oliva tuvo que atender una llamada telefónica para nada amigable; era Giselle Fernández, la hermana de la Presidenta de la Nación, reprochándole los manejos que el Senador tuvo para con 2 personas del armado que la hermana de Cristina estaba llevando adelante en el barrio platense de Tolosa. Según testimonios, Oliva antes de asumir su banca era parte de ese movimiento que Giselle Fernandez junto con Ofelia Wilhelm, la madre de Cristina Kirchner, estaban armando en la localidad platense.
En aquel entonces la familia de la presidenta le pidió a Oliva, cuando éste ya era Senador Provincial, que lleve a su equipo de trabajo en la cámara al hijo de Elsa Huwiler, representante de la rama Mujeres Kirchneristas de La Plata y a Vito Ascolese. El ex director del Colegio Nacional aceptó el pedido pero al poco tiempo terminó rompiendo relación con los dos “recomendados” y no conforme intentó cortarle los contratos. Al enterarse de esto, Giselle llamó a Oliva un tanto “decepcionada” por la actitud del legislador y fue tajante.
Allegados comentaron que la hermana de Cristina le habría dicho al Senador Provincial que debería renunciar; no al bloque sino a la banca que estaba ocupando. La cual tanto ella como Ofelia habían respaldado desde un principio con el nombre de Oliva para integrar la lista; sobre todo entendiendo que el pasado del ex Director del Colegio Nacional lejos estaba del kirchnerismo; Oliva desfilaba hasta el 2005 en las filas del ARI, la fuerza de Elisa Carrió apadrinando a la concejal platense Teresa Razzari que tiempo después se convirtió al Bruerismo. Oliva en aquel entonces pugnaba por encabezar la lista a Diputados Provinciales por la ciudad de las diagonales dentro del ARI y había sido sobre todo Giselle la que articuló la entrada del hoy Senador al Frente Para La Victoria elevando su perfil de director de un histórico colegio platense.
Pero Gustavo Oliva no siguió las “recomendaciones” de la hermana de Cristina y continuó con su carrera en la Cámara hasta estos días aunque el enojo conjunto de la hermana y la madre de Cristina le haya llegado de fuente directa al senador platense.
Los antecedentes dentro del bloque siguen; la Comisión Candela también marcó las diferencias entre sciolistas y kirchneristas, mientras éstos últimos apuntaban contra el Ministro de Seguridad Provincial Ricardo Casal, los alfiles del gobernador desligaban responsabilidad de la fuerza policial.
El año se cierra con enojos al seno del bloque, disputas y un ciclo que deja más interrogantes que certezas a lo que pasará el 2013 cuando además se haga el armado de listas para las elecciones legislativas. Todo un interrogante, como lo que pasará con la profecía Maya en la que se anuncia que Nos adentraremos en una época de cambios, la era de Acuario. Según los cálculos previstos por astrólogos, el cambio sucederá entre el año 2638 y 2680, aunque canalizaciones y cálculos Mayas indican que será el 21 de Diciembre de 2012. Mañana será otro día.