El juez procesó a los jefes de la organización con prisión preventiva, pero como algunos de ellos fueron beneficiados por la Cámara Federal con la excarcelación, seguirán en libertad.
Por otra parte, sobreseyó al maquinista del tren, Marcos Antonio Córdoba, a quien habían acusado de ser el causante del choque que el 22 de febrero pasado dejó un saldo de 51 muertos y más de 700 heridos.
Para el juez, el choque del tren de Once se produjo por la “trilogía siniestra de empresarios, funcionarios y sindicalistas”.
También fueron procesados Antonio Luna, el ex subsecretario de Transporte Ferroviario, y el ex interventor de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), Pedro Ochoa Romero. Su sucesor en el cargo, Eduardo Sícaro, fue sobreseído.
Además de los Cirigliano, fue procesado como jefe de la asociación ilícita Marcelo Calderón-quien presidió TBA y es director de Cometrans, la controlante -, y como integrantes el último presidente de la compañía Carlo Michele Ferrari, el abogado encargado de operaciones especiales del Grupo Carlos Alberto Lluch, y los gerentes Sergio Tempone y Jorge Álvarez.
A la organización comandada por los Cirigliano les impuso un embargo de 600 millones de pesos.