Asimismo, los agentes de la cartera laboral extendieron el relevamiento a las rutas aledañas ya que alrededor de 950 operarios se trasladaban de un campo a otro en transportes deteriorados (35 vehículos) y sin documentación, poniendo en riesgo la salud no sólo de ellos sino de los transeúntes.
En este marco, el ministro Oscar Cuartango explicó que “este operativo es la continuidad de las actividades que venimos realizando durante el año con el propósito de concientizar y avanzar hacia el trabajo decente. Hemos venido realizando reuniones con los empresarios, los gremios y los trabajadores a fin de acordar pasos a seguir para evitar focos de conflicto que se venían dando en la zona, por el flujo de trabajadores entre las localidades y también, debido a las diferencias del valor de las horas de trabajo. Ese es un tema superado que nos permitió seguir adelante y relevar los campos y los vehículos de transporte”.
“Estas tareas no persiguen un fin recaudatorio sino todo lo contrario –explicó Cuartango-, somos inflexibles con las malas condiciones de trabajo y por eso no podemos permitir estas anomalías. Presentamos las exigencias y volvemos en un tiempo perentorio a ver si se cumplen. En otros sectores de la Provincia se ha avanzado considerablemente en este sentido y consideramos que se pueden lograr mejoras en cada punto del territorio”, concluyó.
En cuanto a las inspecciones en los establecimientos, se dividieron en lo que respecta a lo laboral y en lo relacionado a la seguridad e higiene. En el primero de los casos, se detectó que ninguno de los trabajadores pudo acreditar su vínculo legal con las empresas; mientras que en lo concerniente a seguridad e higiene se verificaron importantes deficiencias: sanitarios precarios, instalaciones eléctricas con fallas e improvisadas y basura en las zonas de las habitáculos, entre otras falencias.
A su vez, se verificó que algunos operarios vivían en los mismos campos, en casillas precarias en condiciones insalubres, y también, se constató la falta de documentos de identidad en la mayoría de los casos. Ante este escenario, el ministerio de Trabajo determinó la suspensión de las tareas e instó a los responsables a presentar la documentación de la empresa y del vínculo con los empleados, al tiempo que se inhabilitaron los vehículos y se exigió el inmediato traslado de los menores a centros sanitarios para el control de su salubridad.
Cabe destacar que en su gran mayoría (un 85%) el destino de los trabajadores era el cultivo de girasol, mientras que el resto se dividía entre cebolla temprana, alfalfa, maíz y otros cultivos.
Este operativo, coordinado por el Director de Delegaciones, Jorge Gómez de Saravia y por el Delegado de Trabajo de Patagones, Fabián Firmapaz, se llevó a cabo con la colaboración de la municipalidad de Carmen de Patagones y de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.