Trabajadores de la Clínica del Oeste, la única privada del municipio de Pehuajó, denuncian persecución política del intendente Pablo Zurro y lo acusan de intervenir en la decisión de la obra social provincial IOMA de quitarle la prestación al establecimiento. Por ese motivo, este jueves se realizó una manifestación frente a la municipalidad porque, según señalan, estas medidas podrían significar el cierre del establecimiento y la pérdida de unos 50 puestos de trabajo.
“El intendente siempre ha estado en contra de la clínica por cuestiones políticas, ya que muchos opositores suyos han trabajado en el establecimiento”, señalaron en el centro de salud. “Ahora, el obstetra Juan Garaventa, que se presenta en las próximas elecciones como precandidato a intendente, también trabaja acá”, completaron.
En el oficialismo y la conducción del IOMA aducen “fallas graves” de la clínica. En la clínica acusan al intendente de tener animosidad política y al IOMA de no darles ningún plazo para resolver fallas que consideran mínimas.
El 10 de mayo pasado se realizó una auditoría en la Clínica del Oeste y se labró un acta firmada por dos médicos de IOMA, Jerónimo Chaparro y Domingo Carmosino, en la que se informó una serie de irregularidades leves. A raíz de lo señalado en el documento, la obra social decidió retirar a la clínica como prestadora, sin brindarles a sus directivos la posibilidad de realizar un descargo ni corregir las fallas.
“El informe labrado por supuestos médicos de IOMA dice que hay unas irregularidades leves, que de ninguna manera pueden ser suficientes para quitarle la prestación a un centro médico, más aún considerando que el 70% de los ingresos de la Clínica provienen de IOMA”, explicó el doctor Fausto Cumba, integrante del equipo médico a cargo de la institución.
“Una cosa es que te digan 'tenés 30 días para cambiar o arreglar' estas situaciones que encontraron, pero no pasó eso, decidieron dar de baja la prestación sin darnos la posibilidad de corregir las fallas”, afirmó. “Entre las irregularidades que señalaron hay cuestiones mínimas, como que la zona de Maternidad no tiene oxígeno, cuando nosotros tenemos oxígeno central en todo el edificio. También indicaron que el consultorio de urología no tiene baño, pero los baños no están dentro de los consultorios, están en las salas de espera, los pasillos y otros lugares”, indicó.
Según relataron los trabajadores de la institución, temen por su futuro y el de sus familias ante el posible cierre del centro médico y se convocaron en la jornada de ayer frente al municipio. En tanto, se encuentran juntando adhesiones a un petitorio para evitar que la clínica deje de ser prestadora de IOMA.