El intendente de Río Tercero asumirá la conducción partidaria el 30 de septiembre. Cómo fue el acuerdo con Ramón Mestre. Los desafíos que siguen.
Marcos Ferrer asumirá la presidencia de la UCR de Córdoba el 30 de septiembre.
El candidato a presidente de la UCR de Córdoba por Generación X, Marcos Ferrer, no depuso el llamado a la unidad del partido aún con la citación del juez federal Alejandro Sánchez Freytes quemándole la mano. El exintendente Ramón Mestre, promotor de Más Radicalismo, también quería lo mismo y desistió de la acción judicial.
Unas 48 horas antes de verse las caras en Tribunales, los protagonistas acordaron el nuevo esquema de autoridades del centenario partido. Ferrer asumirá la presidencia del Comité Provincia el 30 de septiembre.
La posta la pasará el negrista Marcos Carasso, que desde la comodidad de su nueva oficinal en el Tribunal de Cuentas (gentileza de Luis Juez) pedía anticipar los tiempos del traspaso.
"Vamos a trabajar para consolidar la unidad y proyectar el partido hacia el futuro", dijo Ferrer a Letra P, después de transpirar el acuerdo.
El intendente de Río Tercero, socio de Rodrigo de Loredo y de siete núcleos internos, encabeza la lista de autoridades. La vicepresidenta 1° será Mariana Giorgetti (Más Radicalismo) y el vicepresidente 2°, Juan Negri (Generación X).
De las 15 secretarias del Comité Provincia, 10 quedaron en manos de la coalición deloredista, tal como pretendían; mientras que las restantes serán para las referencias de Más Radicalismo.
Los delegados al Comité Nacional serán Soledad Carrizo, Ramón Mestre, Elisa Caffaratti y Javier Bee Sellares. La división, en este caso, fue fifty-fifty.
Como convencional nacional quedó el exministro de Defensa, Oscar Aguad, también parte de Generación X. El primer congresal por la capital también es de la agrupación de Ferrer: será Esteban Bria.
Generación X se quedó con la mayoría de los congresales (17 en total), a cargo de definir la política de alianzas; pero se acordó de antemano que el presidente será el mestrista, pero de buenos vínculos con la tropa renovadora, Facundo Cortés Olmedo.
Por último, el Comité Capital será presidido por el exsecretario de Transporte de Mestre, Pablo Farías, otro hombre de buenos vínculos con todos los sectores boinablanca. Completan el esquema Dolores Caballero y Guillermo Ito Farías.
Fuentes bien informadas de la evolución de la interna boinablanca aseguran que el acuerdo al que se arribó es el mismo del primer borrador original. Las partes quedaron conformes porque lograron los objetivos fijados, con concesiones justas. La renovación con integración se logró con altas dosis de entretenimiento y sin intervención judicial.
Habrá que ver como Ferrer compone los tejidos internos en adelante. Las divisiones del partido son profundas y tienen nombre propio: Luis Juez y Javier Milei.
La variable peronista quedó despejada, al menos por ahora. Pese a que Generación X intentó pegar al mestrismo con el Partido Cordobés de Martín Llaryora, el cierre civilizado de la interna fortalece a la fuerza.
El hecho de que la lista de Myrian Prunotto haya quedado afuera de todo acuerdo muestra la necesidad del espacio de iniciar un capítulo que contenga a quienes todavía están adentro, pese a las diferencias.
Los legisladores Dante Rossi y Sebastián Peralta, que decidieron apoyar el espacio que tenía personas de alta confianza de la vicegobernadora, son los grandes perdedores de este sainete. Hombres de histórica trayectoria en el partido decidieron romper el bloque radical y, recientemente, salir del interbloque de Juntos por el Cambios.
Puede presumirse que la prunottista Córdoba con Todos aceptará el acuerdo macro. Al fin y al cabo, el cordobesismo viene sosteniendo que también es necesaria una UCR fuerte en el mapa de poder de la provincia.