El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, prepara una foto con los representantes del PRO en las provincias que trabajan para su candidatura presidencial; será la imagen “del 80%” con la que busca mostrar un respaldo que -afirman en su campamento- no tiene su competidora directa en la tropa amarilla, la jefa de los halcones Patricia Bullrich.
La reunión, agendada para el mediodía de este jueves y organizada por el diputado Omar de Marchi, armador del larretismo en el interior, alimenta la interna a pocos días del encuentro entre la presidenta del PRO y el jefe de bloque de ese partido en la Cámara Baja, Cristian Ritondo. Si bien la organización estaba en el calendario de hace tiempo, la lectura que quedará es la de una respuesta al movimiento de su rival. Es por eso que la idea detrás de la foto es mostrar lo que Larreta considera como “la unidad del 80% del PRO” detrás suyo.
Una muestra de eso ya se vio cuando Bullrich salió a cruzarlo por el operativo de las vallas en las cercanías al edificio donde vive la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. En esa oportunidad, casi todos los presidentes provinciales del PRO, más las figuras con mayor trascendencia de esos distritos, salieron en defensa del alcalde porteño.
La decisión de Larreta no solo busca mostrar su músculo ante Bullrich, sino también enviarle un mensaje al expresidente Mauricio Macri, de quien busca su apoyo en la carrera hacia la Casa Rosada.
Si bien -como contó Letra P- el jefe de Gobierno porteño ya le dijo a Macri que no piensa bajar su candidatura incluso si compite contra él en una interna, está convencido de que todos los movimientos del expresidente son para forzar una negociación entre ambos. “Lo que quiere es sentarse con él para decirle qué cosas son innegociables”, expresó uno de los integrantes del círculo chico del alcalde porteño.
En cuanto a Bullrich, esta semana la exministra de Seguridad empezó a darle forma al acuerdo con el exministro de Seguridad de María Eugenia Vidal. Después de la cena que compartieron el martes por la noche, llegó la unión de los legisladores porteños que responden a cada uno de ellos y que promete ser un obstáculo que Larreta deberá sortear para conseguir aprobar cualquier ley.