ROSARIO (Corresponsalía Santa Fe) El diputado nacional Marcos Cleri tuvo un rol clave en la movida de las diputadas peronistas de Santa Fe, Paola Bravo y Matilde Bruera, que resolvieron armar un bloque propio y dejar de depender del rossista Leandro Busatto.
Cleri fue casi el artífice de la movida. Bravo, quien integra La Cámpora y responde al propio legislador, fue la primera en plasmar el nacimiento del bloque “Lealtad kirchnerista”. Después se sumó la bielsista Bruera, quien acompañó las razones.
Pero el diputado nacional pegó un par de llamados clave. Por un lado, dialogó con Bruera, para asistirla y apoyarla en el movimiento. Pero, por otro lado, también se comunicó con el presidente de la Cámara de Diputados, el socialista Pablo Farías, para anoticiarlo de la novedad. “Lo llamó para anunciarle el nuevo bloque, que van a seguir en un interbloque, pero que no podían estar en el mismo espacio que Busatto”, le filtró a Letra P una legisladora del PS.
Bravo, de todos modos, le confió a Letra P que el movimiento se debía a que el bloque no tenía una cabeza definida. “La conducción del peronismo es Cristina, son todos compañeros los del bloque, pero quizás tengan otra conducción”, dijo la diputada. La frase de la legisladora es un tiro por elevación al propio Busatto, que está en carrera por la gobernación y tiene una disputa versus Cleri por el liderazgo del universo K en Santa Fe.
Las tensiones entre el rosismo y La Cámpora en Santa Fe no son nuevas, vienen de larga data. Ahora se profundizaron como coletazo de la interna nacional del Frente de Todos. Para Cleri, alfil cristinista en la provincia, Busatto es un declarado albertista, de ahí que Bravo remarque lo de “nuestra conducción es Cristina”.
Al margen de las rivalidades, el peso del PJ en la Cámara baja provincial es muy, muy escaso. Entre ocho diputados y diputadas hay cuatro bloques. Busatto quedó al comando del más numeroso, de cuatro, entre las que se encuetran la Movimiento Evita Lucila De Ponti, el presidente del PJ Ricardo Olivera y Luis Rubeo. Bruera y Bravo armaron el suyo y el massista Oscar Martínez y Cesira Arcando (Partido Fe) ostentan dos monobloques.
El juez que atiende el concurso le dio un revés inesperado a la cerealera y abrió una salida impensada. Los nuevos interesados y el rol del Estado.
El gobernador electo quisiera que el senador comande el súperministerio. La condición, irse a vivir a Rosario. También suena para Infraestructura y Producción, que se fusionarán. Gestión Pública y Ambiente pierden estatus.