Alberto Fernández se encargó de que el flamante ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, sepa que su equipo económico ya se prueba su traje. En la reunión que sus enviados mantuvieron con el sucesor de Nicolás Dujovne expusieron la preocupación más seria del candidato a presidente del Frente de Todos el nivel de reservas con el que deberá asumir el 10 de diciembre si ratifica en las generales su triunfo en las PASO.
“El equipo económico del Frente de Todos reiteró su preocupación por el nivel decreciente de las reservas internacionales que desde el último desembolso del FMI se redujeron en más de US$ 9.000 millones”, se informó desde el albertismo en un extenso reporte de prensa.
La reunión en el Ministerio de Hacienda tuvo a Lacunza y al funcionario designado esta semana en esa cartera, Sebastián Katz, mientras que Fernández envió a Cecilia Todesca y Guillermo Nielsen. Según el comunicado, hubo coincidencias en “la necesidad de buscar un horizonte de estabilidad que reduzca el impacto de la crisis sobre los sectores productivos y las familias más vulnerables”.
Según se detalló, se reiteraron en el cónclave “las preocupaciones centrales expresadas oportunamente por el candidato” Fernández, respecto a “la marcha de la economía argentina, a la trayectoria negativa de las principales variables macroeconómicas y al severo impacto recesivo y regresivo del modelo económico en curso”.
“Asimismo –sigue el texto-, se subrayó el impacto negativo de los sucesivos procesos devaluatorios sobre la inflación (en particular en el rubro de alimentos y otros bienes de primera necesidad), como así también de las medidas fiscales inconsultas con las Provincias y las referidas al sector petrolero”.
Otra de las cuestiones aclaradas tras la reunión fue la voluntad de Fernández de no imcumplir con los pagos de la deuda en caso de que el peronismo vuelva al poder. “El Frente de Todos ratificó su compromiso de cumplimiento con todas las obligaciones y los contratos vigentes, en el marco de un modelo económico alternativo que priorice la estabilidad de precios y la recuperación del crecimiento y del empleo”, se anunció.
DISTANCIA Y DIFERENCIA. Para no caer en la trampa del Gobierno de instalar al peronismo como corresponsable de lo que ocurra de aquí en más con la economía, desde el Frente de Todos dejaron claras sus diferencias con el modelo macrista. Así, cuestionaron que "los incentivos han estado en todo momento direccionados al incremento de las ganancias financieras de pocos en detrimento de la economía real, de la viabilidad de las empresas, del empleo y de las condiciones de vida de las y los argentinos". Y señalaron que, "en referencia al acuerdo con el FMI, los referentes económicos del Frente de Todos expresaron su preocupación por el incumplimiento de sus cuatro objetivos fundamentales: trayectoria decreciente de la deuda pública, reducción de la inflación, recuperación del crecimiento y generación de empleo para combatir la pobreza. Resulta particularmente preocupante la pasividad del organismo frente a la caída de las reservas y los mencionados incumplimientos".
"Por último, y en virtud de la línea argumental del Gobierno según la cual la crítica situación de la economía y la reacción negativa de los mercados han sido el producto de los resultados de las PASO, resulta necesario recordar que la asistencia al FMI fue solicitada en junio del 2018 cuando el Frente de Todos ni siquiera se había constituido como tal. A partir de aquel momento, todas y cada una de las proyecciones realizadas por el FMI respecto a la trayectoria de las principales variables económicas (crecimiento, inflación, deuda) han sido incumplidas", cierra el comunicado.