A raíz de la investigación que se desarrolla por el caso de la empresa Avianca que toca de cerca a la familia presidencial, el miércoles último se realizó un allanamiento en la Casa Rosada. El operativo, que se realizó por instrucción del juez federal Sergio Torres, abarcó el registro de diversas oficinas en busca de información relativa a vuelos de Mauricio Macri y funcionarios de la administración central.
Empleados de las fuerzas de seguridad se presentaron en las oficinas de la Secretaría General de Presidencia como así también de Ceremonial y Logística, que manejan toda la organización de los vuelos de la flota presidencial. De esos despachos, retiraron seis cajas con expedientes y documentación.
A su vez, Torres dio un plazo de cinco días a la Secretaría General de la Presidencia para que entregue un informe con todos los vuelos del jefe de Estado y sus colaboradores allegados desde que asumió.
Dentro de los funcionarios investigados se encuentra, además del propio presidente, el ministro de Transportes Guillermo Dietrich, y el padre del actual primer mandatario, Franco Macri.
La investigación judicial se centra en las supuestas irregularidades que se desprenden de la venta de la firma MacAir y del ingreso de Avianca, su comprador, al mercado de vuelos low cost. La denuncia, realizada por dos legisladores del FpV, enumeró una serie de "maniobras tendientes a favorecer un negocio familiar", previas a la venta que habrían posibilitado un mejor posicionamiento en favor de la empresa de la familia presidencial.
También, se realizaron registros en otros 13 sitios, entre los que figura la Inspección General de Justicia (IGJ), la SIGEN (Sindicatura General de la Nación), la Sede de la Fuerza Aérea en el aeroparque Jorge Newbery y la sede central de SOCMA, donde funcionó McAir Jet antes de su venta a Avianca.
Vale señalar que Avianca forma parte de las líneas aéreas conocidas como "low cost", con el aval reciente para volar espacios aéreos del país, algo que viene siendo denunciado por trabajadores del sector.