Ricardo Yapur: “Hoy las entidades del campo no representan a nadie”
Uno de los fundadores y actual CEO de la empresa Rizobacter dialogó con Letra P sobre la falta de representantividad del sector agropecuario y los problemas de la economía y el campo de cara a 2017.
Rizobacter, que nació hace 20 años en un garage en una casa de Pergamino, planea facturar cerca de $3.000 millones el próximo año en base a la producción de elementos microbiológicos e incorporó recientemente a Bioceres, que compró más del 50% de las acciones de la empresa. El CEO de la firma, Ricardo Yapur, analizó la actualidad del campo y la economía con Letra P.
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BIO. Ingeniero Agrónomo (Universidad Nacional de la Plata), tiene 58 años. Se sumó a Rizobacter en 1981, cuando la empresa de Pergamino trabajaba desde un garage en una casa de familia. En 1993 tomó la dirección de la firma, que pasó de facturar 4 millones de dólares ese año a más de 200. Yapur es hoy CEO de Rizobacter, integrada por capitales nacionales. Recientemente sumó a Bioceres, que compró el 50,1 por ciento del paquete accionario. Exportan inoculantes a más de 30 países, con 7 sucursales y una planta en Brasil. El 99 por ciento de su producción se realiza en Argentina.
-¿Cómo ve al perfil del empresario del sector agropecuario?
-Creo que estamos enredados en lo que estamos viviendo, en lo complicado, en lo difícil. Cada uno se mete tanto en su propia micro que nos hace también que no estemos en la calle. Gustavo (Grobocopatel) ha podido armar un equipo atrás muy fuerte que le permite opinar de todo y estar en todos lados, pero porque tiene tiempo; todos los que tenemos que llevar adelante una empresa hoy en día estamos muy metidos en la nuestra. Después, hay gente a la que le interesa participar: yo tengo muy buena relación con Gerardo Bartolomé (fundador de Don Mario) y es un tipo que cuando te sentás a tomar un café, ves que piensa y sabe bien, pero no es alguien que busque los medios todos los días como para contar su verdad o su realidad. Veo algunos empresarios que quedaron pegados en el momento del conflicto por la 125, pero que me parece gente muy buena, por ejemplo la gente de Aceitera General Deheza.
-Quedaron pegados, pero también se despegaron después del conflicto de 2008.
-Sí, pero eso también le generó mucho ruido a ellos. Me parece una gente seria, una gente que sabe en lo que está, una gente que se puso a pelear con las grandes multis y armó esa empresa que es un ejemplo. Creo que hay ejemplos en todos lados, lo que está faltando es la cabeza que los una a todos, la que se dedique a decir "yo lo junto a Bartolomé, a (Roberto) Urquía, a los que están haciendo los limones en Tucumán, lo junto a Yapur". Juntás ocho días a esos tipos y con eso podés hacer algo, pero si alguien no se dedica a juntarlos cada uno va a seguir en la suya porque la micro nuestra nos lleva mucho tiempo y mucho esfuerzo y el Estado es una máquina de impedir en muchos momentos.
-¿Cuál es la representación del sector hoy?¿Las entidades de la Mesa de Enlace los representan?
-Siento que el sector no está representado por nada de todo esto. Yo soy productor agropecuario también, y tengo muchos productores con los cuales puedo hablar y me puedo juntar, pero no veo que estén representados por alguien. Me parece que ahí todos están en la suya viendo qué ventajita sacar para salir adelante pero no veo a nadie como referente.
-¿Cuál es el futuro del sector si no hay nadie que ocupe ese espacio?
-Alguien lo va a ocupar, no creo que quede libre y nadie lo ocupe, esas cosas pasan. Va a aparecer la persona que quiera hacer esto. Si bien no creo en los iluminados, siempre creo en los ejemplos y la gente que haga ver el camino. No veo dentro de nuestro sector alguien que sea quien lleve el camino, siento que Gustavo (Grobocopatel) es exitoso en sus cosas particulares y sin embargo escuchás en la calle que lo critican. A lo mejor la sociedad urbana lo ve bien, pero la sociedad agropecuaria lo critica y yo digo "¿por qué, si es alguien que ha hecho cosas bien y ha puesto en boca de la sociedad urbana al campo?".
“El Gobierno tiene que hacer mucha política para poder ganar las elecciones porque si no las ganan se les va a complicar”.
-¿Pero el problema no lo tienen más con la sociedad urbana que con el mundo agropecuario?
-Creo que nosotros necesitamos primero que la sociedad urbana nos entienda y que vea que no estamos matando a nadie. Que entienda que lo que estamos haciendo es producción, que se están trayendo divisas al país y que se está haciendo comer a la gente. Para eso la sociedad rural en su conjunto, no como entidad, debe dejar de hacer algunas cosas que hace mal con las fumigaciones, los cultivos, el atropello a las selvas. Me parece que son cosas que se tienen que dar para que la sociedad urbana nos acepte, sino no nos van a aceptar por más plata que traigamos.
-¿Qué rol cree que tienen en este panorama las dirigencias gremiales históricas del campo?
-Creo que perdimos la oportunidad histórica. En 2008 era el único momento que la gente nos había entendido, que estaba de acuerdo con el sector, que las gremiales habían entendido que tenían que trabajar y creo que nos dormimos. No sé si nos dormimos por el "no positivo" o porque entraron 10 agro-empresarios, que después la camarilla política se los comió a todos. Se devora a los políticos, imaginate con los agro-empresarios. No veo que hoy estén representando a nadie.
EL CAMPO, EN EL FUTURO CERCANO
-¿Cómo ve el futuro del sector?
-El campo sigue teniendo futuro, esta zona es la que va a alimentar al mundo y yo creo que acá lo que tenemos que hacer es seguir trabajando bien para seguir produciendo con trazabilidad, sin contaminaciones y que el mundo nos quiera comprar. El mejor ejemplo de esto es lo que pasa hoy, que Argentina tiene algunas tecnologías que no puede lanzar al mercado hasta no saber si China las acepta, somos muy dependientes del comprador del producto.
-Justo que menciona eso, este año hubo algunos roces.
-Si te sirve para bajarle el precio a tu competidor, ¿qué mejor? Los chinos son grandes compradores.
-¿Cómo ve la relación con China hoy?
-Tenemos que adaptarnos a lo que pide el mercado y cómo, no podemos decirle a China que ahora no le podemos vender granos, porque los van a ir a buscar a Brasil o Estados Unidos. Acá lo que hay que tratar de hacer es acuerdos buenos, que digan que te llevás el poroto pero te tenés que llevar otra cosa o ayudarnos con algo. Yo creo que arrancamos hace muchos años cuando nos metieron en la cabeza que éramos el granero del mundo y que por eso nos iban a comprar todos, entonces somos muy primitivos vendiendo, estamos vendiendo como nos compraban antes. Hoy no tenemos fuerza, no nos sentamos con Brasil a hacer un Mercosur en serio para hacer que funcione lo nuestro.
RELACIONES POLÍTICAS
-Independientemente de algunos hechos puntuales, ¿había tenido conflictos con el gobierno anterior?
-No, no habíamos tenido nada. Al contrario, creo que eso fue ley para todos. Hubo una mujer que nos dio una mano muy grande totalmente desinteresadamente, que es Paula Español. Nos conoció cuando hicimos una planta de formulación de agroquímicos con DuPont, que estaba trayendo muchos agroquímicos y el Gobierno le empezó a decir que trajeran materia prima. Entonces un día vinieron a decir que iban a construir una planta pero que tenían que traer equipos de afuera, si ellos le iban a dar las DJAI. Se presentaban los documentos y a las 48 horas teníamos las DJAI listas para traerlo, como tenían el compromiso de que iban a salir lo hacían rápido y los bancos nos daban los créditos. Ella se portó muy bien con nosotros, le di un espacio el día que inauguramos la planta.
“La camarilla política se comió a los 10 agro diputados que entraron después de la 125”
-¿Qué año fue?
-Junio de 2015 fue la inauguración, las máquinas habían empezado a funcionar en octubre de 2014. Ella nos fue conociendo durante toda esa etapa y cuando le hicimos el planteo de que la incorporación iba a ser de máquinas nos dio el OK y nos ayudó en todo. Es más, no nos pidió una sola moneda por afuera de la mesa, lo digo en todos lados porque no soy kirchnerista ni me gustó lo que pasó pero se manejó de primera.
-¿Cómo ve el gobierno actual y la economía?
-Creo en muchas de las cosas que están haciendo. Se han enredado mucho con la vieja economía y la vieja política y son un poco ingenuos porque se dejaron enredar. Cuando hablás con la gente que dice que sabe todos te dicen que lo que había que hacer es lo que se hizo, pero que tienen que hacer mucha política para poder ganar las elecciones porque si no la ganan se les va a complicar. El sector nuestro es un sector que evolucionó bien, lo liberaron y tanto el maíz como el trigo explotaron. No estoy en desacuerdo con lo que pasó de no sacarle el otro 5 % de la soja que no es importante por la plata, porque eso lo consigue en todos lados por suerte.
“Con el dólar de $9 veníamos complicados, con esta devaluación que pasó hoy estamos un poco mejor”.
-Le está faltando una palabra clave: inflación. ¿Cómo afecta en su negocio?
-El agro funciona en dólares y siempre funcionó en dólares. Entonces, si bien la inflación es importante... Ahora se quedó un poco el dólar, pero en otro momento era distinto. Con el dólar de 9 veníamos complicados, con esta devaluación que pasó hoy estamos un poco mejor. Básicamente mejoraron mucho las cosas de nuestros clientes, entonces les vendemos un poco más fácil y tenemos un poco menos de costo venta. Se ha ido acomodando un poco todo.
-¿La perspectiva para las empresas del sector cómo las ve para el año que viene?
-No es mala, es buena. Hay distintos sectores, el de la maquinaria agrícola está fantástico, el del agroquímicos está complicado por un problema nuestro porque hay sobreoferta de productos. Los chinos nos están invadiendo, se están instalando acá.