Este jueves los petroleros de Chubut van a las urnas para definir a su próximo secretario general. El actual conductor, Jorge “Loma” Ávila, va por otro período (2017-2021) pero tres competidores desean arrebatarle el poder: Diego González, Carlos Martínez y Albino Kruger.
Ávila es el principal candidato por fuertes razones: el gobernador Mario Das Neves y el intendente de Comodoro Rivadavia, Carlos Linares, se manifestaron a favor de su continuidad en el cargo.
El acuerdo que logró Nación con los trabajadores del Golfo San Jorge no apaciguó el clima de conflicto que propone desde hace tiempo Loma Ávila. El conductor del Sindicato de Petróleo y Gas Privado siempre estuvo alejado de las políticas de Cambiemos para el sector. Mientras el impacto por el tarifazo de gas enardecía a los gobernadores, en los yacimientos denunciaban como YPF, poco a poco, iniciaba un proceso que los perjudicaba. Atento por las decisiones de los ministros, Ávila le advertía Letra P que el titular de la cartera de Energía, Juan José Aranguren, “ni siquiera debería haber asumido”.
Con un frente importante por atender, deberá someterse a una elección que puede generarle ciertos dolores de cabeza. En total, cerca de 12 mil obreros del sector elegirán sus autoridades "Hay que trabajar y tratar de sacar esto adelante. Ellos (por sus rivales) pueden seguir yendo a Buenos Aires para conseguir plata para la campaña, pero también que traigan algo concreto para la gente", disparó Ávila cuando el resto de los aspirantes empezaban a asomar.
Mario Mansilla, actual legislador provincial por Chubut Somos Todos (ChuSoTo), el espacio del gobernador Das Neves, es uno de los que plantea mayor resistencia a la actual conducción que no elude la gran relación que existe con el peronismo a través del intendente de Comodoro Rivadavia, Carlos Linares (FpV). “Voy a ganar. Cuando lo haga voy a dejar mi banca como diputado provincial por Chubut Somos Todos", aseguró el legislador a El Patagónico.
20 mesas, en la sede del gremio en la esquina de Constituyentes y Callao, divididas por empresas, son las habilitadas desde las primeras horas de la mañana. En la sede sindical de la localidad de Sarmiento, más alejada a Comodoro, cuenta con dos mesas. "No somos Neuquén, no somos Santa Cruz. Chubut defiende a sus trabajadores hasta las últimas consecuencias", fue el mensaje de cierre oficialista en la campaña.