El diputado provincial del Frente Renovador (FR) por la Sexta sección electoral, Pablo Garate, presentó una serie de proyectos con el fin de que el Ejecutivo bonaerense interceda ante el gobierno nacional en reclamo de los puntos de coparticipación. El proyecto massista pone en alerta el plan de cogobierno que el Frente Renovador desde du rol “opositor”, acordó tener con Cambiemos. Luego quedar relegado en la distribución de autoridades del bloque, Garate busca posicionarse sobre las figuras de Jorge Sarghini, presidente de la Cámara y Juan Amondarain, jefe de la bancada massista.
“Es de suma importancia de modificar la legislación vigente, para impedir que la provincia de Buenos Aires siga perdiendo participación en la distribución de los recursos de origen nacional”, dijo Garate a la hora de fundamentar su proyecto que tiene como objetivo que Vidal interceda ante el gobierno nacional para reformar la Ley de Impuesto a las Ganancias –la ley 24.073 que diera origen al Fondo de Financiamiento de Programas Sociales en el conurbano bonaerense- eliminando el tope máximo de 650 millones de pesos y, de ese modo, reestablecer un porcentaje para la provincia de Buenos Aires en concepto de distribución de la recaudación del gravamen a las ganancias.
A fin del año pasado, Garate, fue uno de los que pulseó por la conducción del bloque de Diputados del massismo. Pese a que el líder de la fuerza, Sergio Massa, prefería que el jefe de la bancada sea el legislador Ramiro Gutiérrez, los propios diputados definieron que ese lugar sea ocupado por Juan Amondarain; esto generó malestar al seno del bloque.
Es que se daba demasiado protagonismo a los legisladores platenses ya que Jorge Sarghini –también legislador por la región capital- fue convertido el presidente de la Cámara, producto del acuerdo que Massa cerró con Macri y con Vidal. Pese a sus aspiraciones, Garate quedaba a mitad de camino pero -al menos- con la vicepresidencia del bloque. Con 22 meses de mandato por delante, Garate busca mostrar impronta personal para buscar la renovación de su bancada en el 2017, con jugadas que pueden implosionar en la alianza Macri-Vidal.