Uno a uno fueron llegando todos: Scioli, Randazzo, Domínguez, Urribarri, Rossi, Espinoza, Berni, Parrilli, Zannini, Mussi, y más. Gobernadores, legisladores, funcionarios nacionales, provinciales y ministros, todos presentes, salvo excepciones como Martín Insaurralde, que llamativamente mandó a su equipo de prensa, pero que acompañó a Carasatorre y no a él, que se ausentó.
Todas las preguntas en la previa estuvieron orientadas al pedido de Cristina Fernández en cadena nacional de achicar candidaturas, con un "baño de humildad" incluído para los dirigentes. Pero nadie se hizo cargo.
Scioli se manejó en el tono pacifista de siempre y sin brindar ningún título, se limitó a hablar de la Provincia.
El jefe de Gabinete Aníbal Fernández, recientemente lanzado a la carrera por la Gobernación, dijo que para él tienen que haber solamente dos fórmulas presidenciales, algo similar a lo que debería pasar en la Provincia, en donde claro, él mismo se incluyó en una de ellas. "No hablo de los demás compañeros", tiró la pelota afuera y siguió viaje.
El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, tampoco se bajó, dijo que seguirá siendo precandidato.
El jefe de Gabinete bonaerense Alberto Pérez habló con Letra P y dejó en claro que ellos no son quienes definen si se bajan o no los candidatos sciolistas para la Gobernación, como Santiago Montoya y Cristina Álvarez Rodríguez, aunque aclaró que "Scioli no tiene definido un candidato propio". Algo que el ex motonauta también suele remarcar, evitando bendecir a alguien en particular para que lo suceda a partir de diciembre.
"Yo no tengo autoridad para emitir opinión sobre los demás compañeros", dijo el presidente de la Cámara de Diputados Julián Domínguez.
El ministro del Interior y Transporte Florencio Randazzo esquivó la cuestión y dijo que para él los candidatos deben ser aquellos que no se preocupen por las tapas de los diarios. "Que se ponga el sayo al que le corresponda", respondió sobre "el baño de humildad".
Por el contrario, el único que manifestó que si la Presidenta se lo pide, se baja, fue el intendente de Berazategui que quiere ser gobernador, Patricio Mussi.
El Congreso arrancó con un quórum de 588, sobre un total de más de 900.