El vicegobernador bonaerense fue nombrado a principios de noviembre pasado como director de Fútbol del club Banfield, presentado también en conjunto con Claudio Vivas como responsable de las divisiones inferiores. Una vez finalizado el Torneo de Transición, los principales equipos argentinos le pusieron el ojo a los jugadores más destacados del Taladro, que si bien no sumaron muchos puntos, por momentos desplegaron un muy buen fútbol.
Tagliafico, Bertolo, Noir y Cazares, entre otros, son los futbolistas por los que varios clubes se pelean en este mercado de pases argentino. River, Boca, Independiente y San Lorenzo hicieron respectivas ofertas pero pasan los días y no se resuelve ninguna.
Este viernes, el presidente Eduardo Spinosa fue claro en diálogo con radio La Red y explicó el motivo por el que las negociaciones quedan todas truncas: “acá lo que Banfield tiene es una postura muy clara: va a vender en las condiciones que son favorables para el club. Banfield no vende ni presionado por los jugadores, ni por ofertas de otros clubes, ni por presiones u operaciones mediáticas ni mucho menos por presiones del jugador”.
Al darse cuenta de la dureza de su discurso, inmediatamente tuvo que hacer una salvedad: “te aclaro que las operaciones mediáticas no tienen nada que ver con ustedes, sino con intermediarios a través de los medios”.
Es que esa es la lógica del presidente del Senado, que permanentemente declara con tono ultrakirchnerista responsabilizando a los grandes medios de instalar temas que no son de su agrado. Al parecer, la política en Banfield se desarrolla de manera similar, y así lo hizo saber el mandatario de la institución, que no se achica ante las presiones de los poderosos de nuestro fútbol, que expresan abiertamente el interés que tienen por contar con los servicios de las estrellas del equipo que dirige Matías Almeyda.
Un ejemplo fue la negativa de Banfield a Boca por Nicolás Tagliafico. “Yo lo hablo directamente con los presidentes de otros clubes; no me gusta justamente hacer las operaciones a través de los medios”, explicó Spinosa, agregando que “desde Banfield queremos poner nuestro granito de arena en el fútbol argentino, y a algunos les molesta, otros lo ven bien. Lo importante es cuidar el patrimonio del club”. “Con Boca dimos por cerrada la negociación; me junté con Daniel Angelici y la oferta no era la pretendida por Banfield, los tiempos tampoco. Se lo notifiqué a Angelici y me agradeció por ser franco”, comentó.
Hay quienes culpan al vicegobernador de la Provincia, ya que en un año electoral no va a fortalecer a un dirigente identificado con Macri.
Eso sí, cabe destacar que la gestión de Spinosa en Banfield viene siendo elogiada por diversos dirigentes en el mundo del fútbol, y la llegada de Mariotto viene a complementar el buen trabajo que está haciendo el presidente. Por eso también es bien visto cómo el club del sur bonaerense se pone duro en las negociaciones para defender sus intereses.
“Banfield está mejor, estamos trabajando en un proyecto donde estamos entusiasmados con el futuro, pero se hace muy difícil el día a día, porque la carga heredada económica y financiera la verdad que fue muy pesada. Por ejemplo ahora estamos trabajando para que la FIFA no nos saque puntos por una deuda con un jugador uruguayo que no se pagó y después se terminó retirando del fútbol”, detalló Spinosa, pegándole directamente a Carlos Portell, el anterior presidente con el que Banfield se fue a la B.
“Ese descenso insólito que no sólo fue deportivo, sino que fue institucional y económico, con cesación de pagos que tuvo Banfield hace menos de 30 meses. Por supuesto que en un club como Banfield que no tiene la posibilidad de generar recursos genuinos como sí tienen otros clubes la verdad que se siente”, agregó quien también se encarga de la tesorería en la AFA.
Con respecto a esa otra función fue también crítico, al revelar que a la tesorería la encontró en una situación “difícil”. “Muy brava, porque creo que se mezclan los problemas que tiene la propia Asociación económicos y financieros, con los problemas que tienen casi todos los clubes”, analizó, explicando que “hay que resolver no sólo los problemas de la casa -que estamos trabajando muy bien y somos muy optimistas-, sino que después vienen 120 clubes que tienen problemas económicos y financieros”.
Mariotto, por su parte, no hace declaraciones en público con respecto a su trabajo en el club, y por ahora se mantiene concentrado en sus funciones, en donde paradójicamente se contradice con su accionar en Banfield y continúa haciendo lobby en su portal Agepeba para candidatearse como sucesor de Daniel Scioli a partir de diciembre.