Junto al director de la Biblioteca Nacional, Horacio González, y el director nacional de Industrias Culturales del Ministerio, Rodolfo Hamawi, la ministra dio el puntapié ante escritores y figuras ligadas al mundo de la literatura y la cultura, como Noé Jitrik, Mario Goloboff, Martin Kohan, Susana Rinaldi, María Pía López, Tristán Bauer, Ezequiel Grimson, Ricardo Forster.
“Estas jornadas nos llaman a la releer a Cortázar, que es algo siempre tan hermoso y tan necesario. Y va a tener una gran convocatoria porque los escritores son imprescindibles. Vamos a salir más cortazarianos que nunca”, sostuvo Parodi, antes de dar comienzo a las jornadas que reunirán 40 intelectuales locales e internacionales.
La idea de estas jornadas gratuitas que tendrán lugar hasta el miércoles, es debatir sobre la obra del autor de Rayuela en sus múltiples aspectos y trazar vínculos con el cine, el box, la política, la crítica, la traducción y la narrativa actual, a través de distintas mesas moderadas.
“Cortázar siempre decía que él no era un escritor latinoamericano, sino que era un latinoamericano escritor. Eso fue cuando tomó conciencia de la importancia de un intelectual, de un escritor como él, en las sociedades y en los países de América latina”, recordó Parodi.
“Leer a Cortázar siempre enriquece, lleva a la reflexión, abre las puertas de imaginación y de rozar lo fantástico. Es (un escritor) luminoso, atrevido, transgredió las formas, desarmó lo armado, nos propone siempre estar vivos y buscando nuevas formas”, concluyó la titular de la cartera de Cultura.
Algunas de los invitados a las mesas de debate son Néstor García Canclini, Daniel Link, Saúl Sosnowski, Oliverio Coelho, Miguel Vitaglaino, Carlos Gamerro, Carles Álvarez Garriga, Américo Cristófalo, Sylvia Saítta y Luis Chitarroni.
Las jornadas en la biblioteca se enmarcan en el “Año Cortázar 2014: Cien años con Julio”, una iniciativa conjunta del Ministerio de Cultura de la Nación, la Televisión Pública, la Biblioteca Nacional, el Museo Nacional de Bellas Artes, el Museo del Libro y de la Lengua, el Palais de Glace y la Casa Nacional del Bicentenario para rendir homenaje a uno de los más destacados escritores argentinos.