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Legisladores y vecinos se juntan para complicarle el shopping al PRO

Por Gonzalo Palese.- Los dos legisladores de la oposición dialogaron con  vecinos de Caballito para impulsar la creación de un Parque público en el mismo predio que sería habilitado para que la empresa IRSA levante un centro comercial.

 

Alejandro Bodart, del MST, y Pablo Bergel, de Verde Alameda, apoyaron a un grupo de vecinos autoconvocados de Caballito, Almagro, Balvanera, Villa Crespo y Flores, entre otros barrios, que formaron el espacio “Encuentro en Defensa del Espacio Público”.

 

“Como alternativa a las torres y el shopping de IRSA, se propone realizar un gran parque público con equipamiento polideportivo para uso de las escuelas del barrio, espacios sociales y culturales reciclando los viejos galpones ferroviarios y hasta una huerta orgánica para educación ambiental”, se explica en el comunicado firmado por los vecinos, con apoyo del MST y de Bergel.

 

En diálogo con Letra P, una de las referentes del MST y vecina de Caballito, Alejandra Giordano, indicó que se trata de una iniciativa que “responde a las necesidades y pedidos de los ciudadanos, vecinos y colegios que carecen de lugares para las actividades deportivas y recreativas”.

 

Según Giordano, los colegios de la zona no cuentan con lugar para que los alumnos realicen actividades físicas y deben “recurrir a lugares privados”.

 

En principio, se sugirió llamar al espacio verde como “Parque Caballito” pero el nombre final surgirá de una votación realizada por niños y niñas de distintas escuelas de la zona.

 

Si bien se trata de un anteproyecto, con el apoyo de los legisladores puede convertirse rápidamente en un proyecto de ley e ingresar al Parlamento porteño para ser debatido. Cualquier ciudadano puede presentar una iniciativa, pero al tener la firma de un diputado el peso del proyecto es mayor.

 

Pero, el bloque PRO bajaría el pulgar de manera inmediata a la iniciativa debido a que su jefe máximo, Mauricio Macri, es quien presentó el proyecto para modificar las normas urbanísticas de ese predio y, si el mismo es aprobado, levantar la barrera para que la empresa constructora IRSA edifique el famoso “shopping de Caballito”.

 

“Caballito ya tiene un shopping, no necesitamos más. Lo que necesitamos es preservar el espacio público y los espacios verdes, algo que el PRO trata de minimizar siempre porque busca una privatización constante del espacio público”, cuestionó Giordano.

 

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) es aconsejable que exista un mínimo de 10 metros cuadrados de espacio verde por cada ciudadano, mientras que, según informaron los vecinos, “en Caballito tenemos 1 metro cuadrado por persona”.

 

Para Giordano, en caso de que el shopping se construya, el edificio “consumiría un suministro eléctrico equivalente a 80 manzanas residenciales, sumaría más cemento  al barrio y perjudicaría al pequeño comerciante”.

 

Quejas vecinales

 

Cuando el PRO avanzó con esta iniciativa en 2013, muchos vecinos reprocharon el proyecto debido a dos razones principales.

 

Por un lado, porque reduciría la posibilidad comercial de los locales de la zona y, por otro, porque aún no se realizó el estudio correspondiente para determinar el impacto ambiental que puede tener la construcción del edificio.

 

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