Los abogados porteños ingresaron en el último tramo para definir las candidaturas para la próxima elección del Consejo de la Magistratura de la Nación a desarrollarse el 9 de septiembre. Tienen hasta el próximo viernes y por ahora los candidatos más importantes no han mostrado sus cartas.
El Consejo de la Magistratura tiene desde hace años una paridad total entre oficialistas y opositores que lo condujo a una paralización casi total por eso Cristina Kirchner nombró a los camporistas Eduardo “Wado” De Pedro y Julián Álvarez para romper esa paralización a través de diferentes acuerdos con legisladores de la oposición, jueces y abogados que no responden a la Rosada.
En este juego por acomodar la justicia para destrabar el nombramiento de jueces, la elección del estamento de abogados porteños pasa a ser clave junto con la elección para el letrado que representa al interior que se desarrollará el 24 de septiembre.
Jorge Rizzo, ex presidente del Colegio Público de Abogados de Capital Federal, continua en una serie de indefiniciones sobre si será el abanderado de la formula Pro-Gente de Derecho de la Lista 3. Mientras tanto deambula por los medios diciendo que el no quiere ir al Consejo porque no “le gusta el ambiente”, algo que sin dudas varios están esperando a facturarle en caso de que finalmente sea electo.
Ahora Rizzo busca instalar en los medios que en su lugar la candidata de la alianza con el macrismo podría ser Adriana Donato, que fue jurado en el jury al fiscal José María Campagnoli. Sostiene que Donato tuvo “un papel brillante” cuando en realidad todos los votos para zafar al fiscal los redactó el representante de la Corte Suprema, Juan “yuyo” Gauna.
Sin embargo todo indica que será Rizzo el candidato por Gente de Derecho para ser el consejero de la Magistratura de la Nación en representación de la Abogacía de la Capital Federal, y es casi seguro que esta vez sea electo por la falta de un rival de peso y porque el acuerdo con el Pro aumentará su caudal de votos. Rizzo en 2010 había perdido las anteriores elecciones del estamento de abogados de la Magistratura en manos del actual consejero Alejandro Fargosi.
Desde el Colegio de la Ciudad, donde se reúnen a los abogados empresariales y de porte aristocrático ya no saben a quien ofrecerle la candidatura para enfrentar a Rizzo y la semana pasada se sugirió el nombre de Germán Garavano, ex fiscal general de la Ciudad y de buenos vínculos con el Opus Dei.
Garavano no sólo no puede ganarle a Rizzo sino que además es fuertemente rechazado en sectores del Pro porque antes de abandonar la fiscalía general designó decenas de personas con tal de dificultar la gestión de su sucesor Martín Ocampo que hoy casi no tiene margen de acción para hacer nombramientos.
La única posibilidad para los adversarios de Rizzo es que este rechace la candidatura por cuestiones relacionadas con su salud -la semana pasada dijo en radio que tiene un cuadro severo de diabetes- lo cual dejaría bien posicionada a Donato y haría la elección mucho más reñida. La falta de suspenso actual pasa además por el hecho de que solo hay un lugar en juego y es para el que gane la elección.
También ya figuran anotados para la contienda dos agrupaciones minoritarias. Por un lado Abogados de Pie, grupo de extracción peronista que aviso que postulará un candidato y por el otro el grupo Bloque Constitucional, denunciadores seriales de Rizzo, que postulan como candidato una vez más, a Daniel Rybnik.