Es que para ocupar el lugar de Patricio García, debería asumir a Norberto García, funcionario de Randazzo. Según pudo saber Letra P, el ministro de Seguridad Alejandro Granados, intercedió en la negociación y en la semana llamó a Randazzo para asegurar la presencia de García en el recinto.
Pero cuando García se sentó en su banca, el massismo no aprobó la incorporación de Norberto ni la licencia de Patricio.
Luego se pidió un cuarto intermedio, se volvió y se llamó nuevamente a un cuarto intermedio. Ya sin salida, la situación se volvía cada vez más difícil para el Frente para la Victoria. Fue allí cuando Mariotto definió, en acuerdo con Alberto De Fazio y Cristina Fioramonti, reanudar la sesión para el lunes.
Antes de levantar la sesión, le negó la palabra al senador del Frente Renovador, Roberto Costa. Lo que generó el rechazo del legislador entre gritos, mientras los senadores ya se levantaban de sus bancas.
Al momento del cuarto intermedio, fue el cuñado de Sergio Massa y senador por el FR, Sebastián Galmarini quien disparó: “escándalo y vergüenza. Senadores y licencias truchas en el Congreso bonaerense. Seguimos esperando el tratamiento de policía municipal”.