Las tareas, según revelaron fuentes judiciales a la agencia DyN, comenzaron con la intervención de especialistas del Cuerpo Médico Forense, de la Procuración General de la Nación y del Equipo de Antropología Forense.
La exhumación tiene como objetivo la obtención de material para extraer la cadena genérica del cuerpo sepultado como NN para determinar fehacientemente si corresponde a Luciano Arruga, y en caso afirmativo entregar el cadáver a sus familiares, para que procedan a darle nueva sepultura.
El juez Salas dispuso otra serie de medidas derivadas del hallazgo del cuerpo, que permaneció sepultado con identidad desconocida durante más de cinco años.
El viernes pasado, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) anunció que el cadáver del joven había aparecido en el cementerio de Chacarita, enterrado como NN tras permanecer desaparecido casi seis años.
Según los registros de la necrópolis, el cuerpo fue enterrado el 11 de mayo de 2009, después de permanecer en la morgue desde la madrugada del 31 de enero de ese mismo año. La versión policial indicó que falleció como consecuencia de un accidente de tránsito, pero la familia señala que efectivos de la Policía Bonaerense podrían tener responsabilidad en su muerte.
El joven fue visto por última vez el 31 de enero de 2009 en Lomas del Mirador (La Matanza), cuando fue interceptado por un patrullero y llevado a una dependencia de la comisaría 8va.
Arruga denunció ante sus familiares que los policías de Lomas del Mirador querían obligarlo a robar para ellos, pero se resistió.
La difusión de la noticia de la exhumación causó malestar, ya que el expediente está bajo “secreto de sumario” y la medida de prueba que se realizó en el cementerio porteño debió permanecer en reserva.