En apenas dos años, el General obtuvo conquistas sociales que en más de cien años los gobernantes anteriores prefirieron darle la espalda al pueblo; sin embargo él los escuchó y les dio sus derechos a pesar de saber a lo que se exponía.
Juan Domingo Perón fue un líder indiscutido y fue un hombre que con la humildad que lo caracterizaba les agradeció a los trabajadores lo que hicieron por él. Solo hace falta repasar los libros de historia para dejar en claro que siempre estuvo del lado del trabajador.
En 1949, cuando ya era presidente, en esa misma plaza y un 1º de mayo, recordó cuánto quería al pueblo: “He sido leal con mi pueblo y, Dios sea loado, mi pueblo ha sido leal conmigo. Y al afirmar una vez más esta lealtad y esta sinceridad entre el gobierno de los trabajadores y el pueblo argentino, quiero recordar lo que tantas veces les he dicho desde la vieja Secretaría de Trabajo y Previsión: `Seamos unidos, porque estando nosotros unidos, somos invencibles, que la política no divida a los Sindicatos ni ponga a unos contra otros porque, el interés de todos es la causa gremial de los trabajadores por sobre todas las cosa”, señaló.
Pasaron 69 años de aquel 17 de octubre de 1945 y hoy seguimos luchando para que todos los trabajadores a lo largo y a lo ancho de Argentina puedan contar con todos los derechos que se merecen. Los desafíos para los años venideros es terminar con la precarización laboral y que cada uno de los habitantes de esta tierra cuenten con un trabajo formal tal como lo soñó nuestro líder y fundador del movimiento. El mejor homenaje que se puede hacer para recordar esta fecha es redoblar esfuerzos y cumplirle a Juan Domingo Perón.