El megaproyecto levantará una nueva ciudad a orillas del río en Avellaneda y Quilmes, una urbanización similar a la de Puerto Madero en la Ciudad de Buenos Aires. La misma, fue cuestionada por lo que representa la tala de la reserva natural de la región y las vinculaciones políticas de los intendentes de ambas localidades, Francisco “Barba” Gutiérrez y Jorge Ferraresi, con la empresa Techint.
Ambientalistas denunciaron que el emprendimiento afecta gravemente al medio ambiente, “al destruir uno de los últimos vestigios del bosque nativo costero en la región”, el bosque ribereño Quilmes-Avellaneda que tiene un gran valor para la conservación de los recursos naturales y constituye el límite austral de dispersión de varias especies, además de ser hábitat de animales y plantas poco frecuentes en la región. Por otra parte, es reconocido como el último espacio verde significativo de esa zona.
El complejo “Nueva Costa del Plata” se construirá sobre 700 hectáreas sobre la orilla del Río de la Plata, en terrenos que pertenecían al Ceamse y que durante años fueron rellenados con basura. El 70 por ciento de las tierras pertenecen a Quilmes y el 30 por ciento restante a Avellaneda y se espera que en la nueva “ciudad” vivan unas 25 mil personas.
En diciembre del año pasado, el intendente Gutiérrez estaba a punto de enviar al Concejo Deliberante la derogación de la ordenanza que impide la edificación en los espacios verdes ribereños a cambio de que la firma construya un hospital de alta complejidad en el distrito. Mientras, sectores ambientalistas pedían que se respete el status de Reserva Ecológica de los terrenos.
Según los informes científicos, la Organización Mundial para la Salud fija como óptimo 15 m2 de espacios verdes por habitante y como mínimo 10 m2 y en la actualidad; en Avellaneda estos espacios verdes se reducen a 0,40 m2 por habitante y en Quilmes a 0,50 m2, un 97,4% y 96% menos de los espacios verdes necesarios para una adecuada calidad de vida.
En enero pasado, la “Asociación para la Protección del Medio Ambiente y Educación Ecológica 18 de Octubre” y un grupo de 16 vecinos de Quilmes y Avellaneda que integran la Asamblea “No a la entrega de la Costa Quilmes y Avellaneda”, patrocinados por el Dr. Leandro Giannini, presentaron una acción judicial ante la Justicia federal de La Plata contra la empresa “Inversiones Urbanas Nuevo Milenio S.A.”, la provincia de Buenos Aires y la municipalidad de Avellaneda, solicitando el cese y recomposición del daño ambiental ocasionado por el proyecto.
Junto con la demanda los actores pidieron la urgente suspensión de las obras, pero el juez de Primera Instancia Alberto Recondo se declaró incompetente. La Cámara Federal revocó a fines de enero la decisión de Recondo, ratificó su competencia y dispuso la medida cautelar requerida.
El proyecto, prevé la construcción de torres de viviendas, centros comerciales, hoteles, cines, canchas de golf y una sede de la Universidad de Avellaneda, todo con acceso al río y a cinco minutos de la ciudad a través de la Autopista.
En 2009, la Universidad Nacional de La Plata elaboró un informe donde sostienen que el megaproyecto expone la situación de contaminación y realiza una serie de recomendaciones a las autoridades políticas.