Después de 20 años, un demócrata asumirá la alcaldía de Nueva York

El candidato demócrata Bill de Blasio, calificado como “izquierdista” por sus reivindicaciones sociales, ganó la batalla para ser el próximo alcalde de Nueva York, según los sondeos de boca de urna.

De Blasio logró sacar ventaja sobre su rival republicano, Joe Lhota, incluso en barrios tradicionalmente más conservadores, según indicaron las encuestas divulgadas por medios locales.

 

El nuevo gobernador, de 52 años, asumirá el cargo en enero y será el primer alcalde demócrata de la ciudad en 20 años, después de David Dinkins (1990-1994).

 

El candidato demócrata basó toda su campaña en la creciente desigualdad económica y la falta de oportunidades que sufren los habitantes menos favorecidos de la ciudad, en la que casi la mitad de la población está por debajo o muy poco por encima del umbral de pobreza.

 

De Blasio, quien reemplazará en el cargo al multimillonario de Wall Street Michael Bloomberg, está casado con una mujer negra, tiene dos hijos birraciales y ha presentado con éxito a su familia como un ejemplo de lo que debe ser la ciudad.

 

En otra elección celebrada hoy en Estados Unidos, el gobernador del estado de New Jersey, el republicano Chris Christie, fue reelecto para un segundo mandato con una amplia mayoría, según las proyecciones de varias cadenas de televisión en Estados Unidos.

 

Christie, se impuso con facilidad a su rival demócrata, Barbara Buono, según indicaron la CNN y la NBC al cerrar los centros de votación.

 

Con un 18% del escrutinio realizado, Christie, criticado por el ala ultraderechista de su partido, el Tea Party, tenía el 62% de los votos frente al 36% para Buono.

 

Las encuestas a boca de urna muestran que Christie, de 51 años, logró un apoyo significativo entre grupos de población que en general han dado la espalda a los republicanos en los últimos años, como las mujeres y las minorías.

 

En Virginia, también se celebran elecciones para elegir a un nuevo gobernador, y los sondeos a boca de urna muestran una cerrada pelea entre el procurador general del estado, el republicano Kenneth T. Cuccinelli, y el gobernador, el demócrata Terry McAuliffe.

 

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