Cuando el cimbronazo del fin de semana comenzaba a diluirse lentamente, un nuevo capítulo surge en el ataque al gobernador de la provincia de Santa Fe, Antonio Bonfatti. Lo exacto es que todo sucede en el día que las pericias desligaron al único detenido involucrado.
Según publica Rosario 3, no sólo el sms fue dirigido al titular del ejecutivo, sino que también tendría como objetivo a un funcionario del Ministerio de Seguridad. En esta situación, en una de las provincias más importantes del país, se decidió reforzar la custodia de su máximo referente político.
“No quiero predeterminar qué es lo que ha sucedido. Sí yo creo que independientemente de quiénes hayan sido, en la ciudad de Rosario todos sabemos que en los últimos años han sucedido una serie de hechos que terminan en este ataque a la casa del gobernador”, reconoció el ministro de Defensa argentino, Agustín Rossi, quien generó polémica en las últimas horas.
“Lamentablemente el socialismo tiene este tipo de actitudes. En lugar de valorar seriamente el gesto de la oposición y el mío personalmente, salen con una serie de críticas y descalificaciones, que hacen que uno sienta que va a dar un abrazo solidario y te meten un cuchillazo por la espalda”, había dicho el funcionario, quien es protagonista en el hecho, aunque sea, desde lo dialéctico.