El encuentro se desarrolló en el Aula Magna María del Carmen Maggi del Complejo Universitario de la Universidad Nacional de Mar del Plata. Además del presidente del Senado, encabezaron el Foro el intendente de General Pueyrredón, Gustavo Pulti, y legisladores oficialistas y opositores.
“El Estado debe tener una importante presencia en la regulación del juego”, dijo Mariotto, aunque aclaró que “la jornada tiene que ver con escuchar todas los puntos de vista y reflexionar para sacar a partir de este debate la mejor ley posible”.
De esta manera se continuó dándole forma a la mecánica que impulsa el ex titular del Comfer, que lleva como nombre “La Legislatura sale a la calle”, y tiene como inmediatos antecedentes los debates por la Ley de Medios y la Policía Judicial. Mariotto volvió a destacar esta manera de discutir y escuchar propuestas desde distintos ámbitos de la sociedad.
Por su parte, Martello –estudioso de la temática del juego- recalcó la necesidad de volver a Perón, diciendo que “aquello que sale del pueblo, al pueblo vuelva”. Pidió que “exista la actividad con ciertos límites, en lugares específicos para el ocio”. Además, cuestionó que a partir de los noventa los gobiernos justicialistas traicionaron a su líder histórico, llenando de bingos e impulsando la ludopatía en el territorio bonaerense.
El presidente del bloque de la Coalición Cívica en la Cámara baja provincial citó paradójicamente a Perón, remarcando justamente que “desde nuestra propia diversidad política, proponemos, lisa y llanamente, volver a los fundamentos y al espíritu del sistema que instauró el general Juan Domingo Perón cuando estatizó los casinos y creó el Instituto Nacional de Lotería y Beneficencia”. Y luego expuso la evolución del marco normativo bonaerense del juego, haciendo hincapié en las medidas adoptadas por los gobiernos de Antonio Cafiero, Eduardo Duhalde, Carlos Ruckauf, y Felipe Solá hasta llegar a la vigente gestión de Daniel Scioli, quien junto a sus ministros hicieron “una de las movidas más escandalosas del último tiempo al prorrogar hasta 15 años las licencias de 14 salas”.
“Algunos dicen ´no se puede´ y sólo ofrecen medidas basadas en lograr más recursos. Nosotros les decimos: no son los recursos únicamente, es lo social, es nuevamente la lucha por los que menos tienen. Hoy no es Braden o Perón, pero la disyuntiva sigue siendo la misma, Conservadores o Populares. Hay dos veredas para transitar, la de los facilitadores del negocio desde el Estado o la que reivindica la historia del Peronismo”, concluyó Martello.