Un año sin Amy

Cuando Amy Winehouse falleció hace un año, el 23 de julio de 2011, la industria de la música se vistió de negro por la pérdida prematura de un icono moderno, con una voz característica y un estilo único.

A un año de la muerte de la cantante británica, los homenajes alrededor del mundo incluyen la edición de un álbum póstumo con material inédito y hasta una nueva institución de caridad para ayudar a personas con problemas de abuso de sustancias.

 

Winehouse, cuyo último disco Back To Black es uno de los más vendidos del siglo XXI, falleció producto de una intoxicación etílica después de ingerir vodka, en su lucha interna con el consumo de drogas.

 

Su temprana muerte fue catalogada por los medios como una más del “club de los 27”, junto a la de los músicos Jimi Hendrix, Kurt Cobain, Jim Morrison y Janis Joplin que también murieron a los 27 años.

 

Amy vendió 1,7 millones de discos desde su muerte, con el cover del tema de The Zutons, Valerie, como el tema más vendido en su carrera con 767.000 copias hasta la fecha, combinadas su versión en solitario y la colaboración con Mark Ronson.

 

Su álbum Back To Black lleva vendidas 3,5 millones de copias, mientras que su obra póstuma Lioness: Hidden Treasures, superó las 750.000 copias en menos de un año.

 

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