Este jueves, la Corte Suprema de la Provincia de Buenos Aires confirmó la suspensión de Blas Altieri al frente de la intendencia de Pinamar, en medio de las graves imputaciones por la adjudicación irregular de viviendas: entre los beneficiarios se encontraron 2 hijas del intendente vecinalista, allegados y hasta familiares de funcionarios locales.
La defensa del intendente, había planteado un conflicto de poderes ante la Corte a través de una medida cautelar para desacreditar la suspensión de carácter preventivo que le aplicó el Concejo Deliberante, hasta que se expida definitivamente sobre su posible destitución.
Con cuatro votos a favor -y tres abstenciones- finalmente se confirmó el desplazamiento del funcionario. Por el momento, ocupará su lugar el primer candidato de su lista, el concejal Hernán Muriale.
En diálogo con este portal, el edil y actual presidente del Concejo, Alberto Germian, advirtió que “para los primeros días de julio o mediados del medio mes se escuchará el descargo del intendente y ahí se decide si corresponde o no la destitución”.
De 33 cargos por los que se lo acusan, Altieri -quien llegó al poder a tráves de una movimiento vecinalista y con el respaldo del gobernador Daniel Scioli- fue imputado por 31. La causa más mediática que tiene entre la espada y la pared a Altieri, es la adjudicación de viviendas sociales entregadas a personas de su circulo para fines pocos claros. También aparecen otros cargos.
Germain, aclaró a Letra P que “Altieri compró un auto de alta gama en diciembre del año pasado, cuando por esos días decía no tener dinero para la colonia de verano de los chicos humildes de Pinamar y la suspendió. Y después pago 150 mil pesos a una concesionaria de autos”. Además, agregó que “para la ampliación del Hospital Comunitario de Pinamar la licitación la ganó un ingeniero que no tenía título universitario”. En la inauguración de la ampliación Altieri estuvo acompañado de Daniel Scioli.