El caso de Mincarelli fue bastante digno, ya que fueron varias las lista peronistas tanto oficiales como del peronismo opositor las que se presentaron en la ciudad de Berisso. Por eso, fue premiado con un aparente ascenso al frente del Instituto Nacional de Capacitación Política (INCAP), dependiente de la cartera que conduce Florencio Randazzo.
El que parecía que continuaba su carrera en ascenso, a pesar de haber salido cuarto entre cinco listas que se presentaron en la interna platense, es el cuñado del ex gobernador Felipe Solá, el joven dirigente ultra K, fundador de la Generación del Bicentenario, Guillermo Justo Chaves. Tan fuerte fue el golpe electoral que Chaves desalquiló la sede de su agrupación, que tenía en la esquina de las calles 13 y 46 de la capital bonaerense, luego de la elección.
Una vez ratificado el ministro del Interior en su cargo, Guillermo Justo esperaba una ratificación o un ascenso. Lo primero no llegó y lo segundo, según fuentes allegadas, no llegará. “Guillermo tuvo todas las oportunidades, Florencio le dio toda su confianza pero después de agosto ya nada es lo mismo”, aseguraron las fuentes sobre el futuro del dirigente quien, con un destino incierto, espera alguna señal que no lo muestre tan derrotado después de ser desplazado de su cargo al frente del INCAP.