“El Consejo está indignado por el ataque contra la embajada británica en Teherán y lo condena completamente”, señalaron los ministros de Exteriores del bloque en una declaración por escrito.
Como consecuencia del ataque, el gobierno británico de David Cameron decidió cerrar su embajada en Irán y ordenar que toda la delegación iraní sea expulsada de territorio británico en las próximas 48 horas. La medida fue tomada en represalia por las protestas internacionales que tuvieron lugar anteayer en la embajada en Teherán. De este modo, aumentó el aislamiento del régimen que encabeza Mahmoud Ahmadinejad, en momentos en que crecen las sospechas de Occidente de que Irán intenta desarrollar armas nucleares.
En respuesta a las agresiones y teniendo en cuenta lo pactado en la Convención de Viena, los gobiernos de los países miembros se comprometieron a tomar medidas. Por eso, Alemania, Francia y Holanda siguieron los pasos del Reino Unido, y también retiraron a sus embajadores del país en cuestión y muchos miembros de la UE comenzaron a interrogar a sus respectivos representantes acerca de tal intervención.
Por otra parte, los ministros de asuntos exteriores de la UE han decidido, esta tarde, cooperar con la Liga Árabe para garantizar una resolución pacífica y exitosa, luego de acordar que el presidente sirio, Bashar el Assad debe renunciar para que la misma pueda resolverse como es esperado.