“María Alejandra Viola, candidata a viceintendenta de Juntos por el Cambio, no vota en Paraná, no tiene domicilio en la ciudad. Es de La Paz y ni siquiera votó en las PASO”, denunció el candidato a viceintendente de Más para Entre Ríos, David Cáceres, a través de un hilo en X. “Parece un chiste, pero es la misma práctica de su candidato a Gobernador, el porteño Rogelio Frigerio”, agregó el compañero de fórmula de Rosario Romero.
Viola fue concejala por la ciudad de La Paz, donde tiene su domicilio legal, y después diputada provincial, banca desde donde se enfrentaba al exgobernador Sergio Urribarri cuando éste ocupaba la presidencia de la Cámara baja. Desde hace ocho año vive en Paraná, donde en este último tiempo se incorporó al grupo político de Emanuel Gainza, el candidato a intendente de Juntos por Entre Ríos, y terminó siendo la elegida para acompañarlo en la formula. Trabaja también desde hace algunos años en la ciudad en la Fundación Hacemos, que estructura parte de la campaña de Gainza.
“Uno no es paranaense por dónde nació sino dónde elige vivir, y yo elegí Paraná, donde tengo mi centro de vida”, explicó Viola a la prensa local y contó: “Lamentablemente no puedo votar en Paraná hasta que unifique mi domicilio con la residencia”.
“No es fácil instalarse como abogada”, argumentó la compañera de fórmula de Gainza para detallar: “Tengo el centro de notificaciones legales y mi estudio jurídico con la dirección que figura en el DNI”.
Viola fue durante estas horas la única encargada de hablar en público del tema. Juntos tiene una hoja de ruta de acá al domingo 22 de octubre y pretende cumplirla lo más ajustadamente posible, explican desde el espacio, sin distraerse ni darle la relevancia que el peronismo pretende asignarle al asunto.
Sin posibilidades de impugnación de la candidatura por este motivo, porque la residencia que demanda la Constitución está probada, la discusión es netamente de carácter político. El peronismo puede subirse al relato de que en Juntos no respetan el origen territorial de los candidatos y los colocan donde es necesario para la estrategia electoral. Este argumento enlaza con la campaña a nivel provincial del peronismo, basada en la entrerrianía como contracara del supuesto porteñismo de Frigerio.
La discusión se da, también, en un escenario de paridad en las encuestas, aunque en ambos campamentos digan que van adelante. Sin embargo, que el peronismo utilice su tiempo, el recurso más escaso a menos de 20 días de las elecciones que definirán los próximos cuatro años de la ciudad que es, además, un territorio donde puede definirse el futuro de la provincia, puede leerse como un recurso que con mayor holgadez no se utilizaría.
Mientras desde Juntos designaron a la propia Viola a explicar porque, aseguran, la intención no es tapar el tema, desde Más para Entre Ríos le sumaron volumen a Cáceres después que fuera el que tirara la primera piedra. “Nuestra ciudad y nuestra provincia merecen candidatos propios”, escribió en redes sociales Nicolás Mathieu, quien enfrentó a Romero en la interna y hoy está incorporado a la campaña. Más severa fue la camporista Stefanía Cora, que habló de “una fórmula de falsificadores”.