El peronismo expulsará al senador tras su apoyo a la ley ómnibus XXS. Sin estructura, el exdeportista queda en el radar de las partes rotas del oficialismo.
Camau Espínola, senador por Corrientes. (Foto NA)
Con su apoyo a la ley ómnibus XXS de Javier Milei, Camau Espínola abandonó definitivamente el peronismo de Corrientes. Al menos eso aseguran en el PJ provincial que este miércoles, en medio de un proceso de reacomodamientos internos, comenzó a desandar el camino de su expulsión.
En el justicialismo avanzan en la normalización de partido que, en principio, tendrá elecciones internas el 17 de noviembre. En ese marco y con el debate del Senado en pleno desarrollo, Teresa García y Máximo Rodríguez encabezaron este miércoles, como interventores, un plenario en el que la furia contra el exmedallista olímpico copó el centro de la escena.
“El que avisa no traiciona”, dijo la senadora bonaerense a cargo de la intervención del partido que anticipó que pediría la desafiliación de Espínola. "Él fue electo en nombre del peronismo y votar a favor de un gobierno que hambrea a nuestra gente no es de peronista”, lanzó García.
Para quienes vienen militando campañas de Espínola desde 2009, Camau decidió irse del peronismo. Advierten que encaró el debate del megaproyecto libertario sin consultar ni compartir su estrategia con el espacio. Para colmo, advierten, el empate en 36 “lo dejó expuesto”. Una abstención del correntino hubiese alcanzado para que la ley fuera rechazada.
Cuando el voto de Espínola terminó de confirmar lo que ya por la tarde se daba como un hecho consumado, el correntino se convirtió en blanco de la bronca opositora en redes sociales. Con un reposteo en Twitter, Cristina Fernández de Kirchner se sumó a esa ola de señalamientos que también incluyeron al entrerriano Edgardo Kueider.
Los reclamos para la tercera pata del bloque Unidad Federal, la cordobesa Alejandra Vigo, se concentró apenas en una parte de su provincia. Más allá de las fronteras mediterráneas, casi nadie cuenta a la esposa de Juan Schiaretti dentro del peronismo.
Esa decisión del bloque fue la que le terminará costando a Espínola la desafiliación del partido que todos dan por sentada en Corrientes. “Depende de la conducción nacional, que es la que lo propone, así que sólo es un trámite”, avisaban ya en la mañana del jueves.
En lo práctico, la consumación de la partida de Camau despeja el camino para los precandidatos del panperonismo que ya caminan el territorio pensando en la elección que el año que viene definirá al sucesor del gobernador Gustavo Valdés. Entre los más renombrados aparecen el intendente de Paso de los Libres, Martín “Tincho” Ascua; el de Virasoro, Emiliano Fernández; y el diputado provincial Germán Braillard.
Es un escenario político en pleno reseteo, Espínola aparece entonces como una figura que podría despertar el interés de algunas de las partes que se desprenden de la implosión del oficialismo. Tanto para Valdés como para un eventual armado de Ricardo Colombi, Camau podría representar “la pata peronista” que siempre buscan las estructuras multipartidarias que encabeza el radicalismo local.
Aunque no lo descartan, sus compañeros no lo imaginan formando parte de un potencial armado libertario, que tiene al diputado Lisandro Almirón como principal referente luego del empujón que recibió por parte de Karina Milei y Martín Menem, las dos cabezas del armado de La Libertad Avanza a nivel nacional.
Lo que sí, advierten, resultará difícil para el hombre que llegó a la política como héroe olímpico en la primera década del siglo XXI conservar el apoyo del electorado peronista. “Ese tiempo está terminado”, señalan, tomando como base el descontento general de la militancia luego del apoyo a la ley libertaria.
También están quienes apuntan que su imagen ya no goza de la popularidad que en algún momento supo ostentar y aseguran que, sin estructura, el futuro del senador estará limitado a los tres años que le restan en la cámara alta.
Acoplado al calendario nacional, el PJ de Corrientes normalizará su situación el próximo 17 de noviembre. El día de la militancia peronista, el mismo domingo que el congreso partidario definió para las internas a nivel nacional, el justicialismo correntino buscará volver a la normalidad institucional luego cinco años.
Los trámites para comenzar con la búsqueda de afiliaciones y confirmar la fecha de las elecciones ante el Juzgado Electoral ya comenzaron y la semana que viene, anticiparon, se presentarán las modificaciones de la Carta Orgánica.
Con todo, en el peronismo las expectativas están puestas en lograr una unidad que sirva para fortalecer al partido de cara a las elecciones del año próximo y poder arrebatarle el gobierno al radicalismo, que se sostiene en el poder correntino desde 2001.