La unidad de la alianza Juntos en el distrito de Bolívar se terminó antes de ser parida: el concejal PRO electo Ariel Alomar anunció que conformará un monobloque en el deliberativo local, tomando distancia de sus compañeros radicales, que ganaron la interna en septiembre y encabezaron la lista de la que él formó parte en las generales del 14 de noviembre.
Alomar pasará a conformar el monobloque Juntos-PRO, dejando por el momento la unidad con quienes fueron sus compañeros de lista, Luciano Carballo Laveglia, Emilia Palomino y María Eugenia Goyechea, quienes a pesar de representar a distintos espacios hasta el momento continúan juntos.
La decisión fue comunicada por Alomar al secretario administrativo del Concejo, Marcelo Valdez, mediante un escrito que lleva su firma. Allí dice: “Tengo el agrado de dirigirme a usted con la finalidad de informarle que a partir del día de la fecha constituyó el bloque Juntos PRO. Solicito tenga a bien disponer de un espacio en ese Honorable Cuerpo y en el Recinto de Sesiones para efectuar mi tarea”.
Alomar, exgerente de la Sociedad Rural, encabezó la tira de postulantes del macrismo en las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) pero perdió frente a la nómina de la Unión Cívica Radical (UCR) y de la Coalición Cívica (CC). Sin embargo, en la integración se quedó con el tercer puesto que finalmente, en noviembre, le dio el pasaporte a una banca en el Concejo.
El dirigente pegó el portazo antes de asumir para evitar la estridencia política que generaría una ruptura de bloque. Aunque en términos prácticos sea lo mismo, el pedido de conformación de un monobloque antes de la asunción atempera las repercusiones.
Bolívar, gobernada por el peronista Marcos Pisano, resultó un distrito clave en la vuelta de campana que el Frente de Todos logró darle al resultado de las PASO en la pelea por una senaduría. En septiembre, el oficialismo cosechó 30%, quedando a tres puntos de los 33,33 establecidos como piso para obtener una banca en la Cámara de Senadores por la Séptima sección electoral. Con Eduardo Bucca al frente de la campaña, en noviembre alcanzó el piso que le permitió al gobernador Axel Kicillof alcanzar su objetivo principal en las elecciones de medio término: dar vuelta la correlación de fuerzas en la Cámara alta donde la oposición perderá la mayoría.