La pandemia, un tiempo de cambio

El virus y la cuarentena forzada trajeron muchas cosas positivas, pero cómo será el mundo cuando termine esta tormenta.

El efecto del virus en el cuerpo depende de su “dosis". Hasta la fecha, no hay vacuna ni medicamentos probados para el coronavirus. La única arma que tenemos es la fuerza que tiene cada persona para pelear con su propio sistema inmunológico. 

 

Surgen distintas posturas, todas tienen un umbral individual de miedo distinto. Algunos compran alimentos con varias semanas de anticipación y cierran la puerta de su casa. Otros afirman que el coronavirus no les interesa en absoluto y continúan reuniéndose con amigos y viviendo su vida mirando horrorizados a la paranoia del resto. 

 

Para ser honesta, el último grupo me asusta aún más que el primero. De hecho, hoy es importante entender que el peligro del coronavirus es real. Siempre está el sector que se benefician de la situación, no podemos negarlo. Sin embargo, esas personas no son la mayoría, noto más y más positivo. 

 

Hoy pienso que, aunque es dura, la soledad es un recurso para comprender mejor la situación y repensar. La pandemia y la cuarentena forzada trajeron muchas cosas positivas. La gente comenzó a leer libros nuevamente y, en general, se volvió más inteligente, pensó en la vida. 

 

Quizás en el futuro, se entienda que no es necesario pagar millones a los jugadores de fútbol sino a los científicos, médicos y virólogos. Frente a un enemigo invisible y omnipresente, las personas se dividieron instantáneamente y se enemistaron entre sí. De un día para para otro "el mundo que conocíamos dejó de existir”. 

 

Esta pandemia, implica la creación de una red mundial de atención médica, un movimiento mucho más libre en todo el mundo, la reorganización de la economía: las personas son más importantes que las fluctuaciones del mercado. 

 

Suponemos que esto "pronto pasara”. El virus y su epidemia, en realidad y en la mente, terminarán. Creo que nadie lo duda. ¿Pero qué pasará con el mundo el día después?, ¿Qué pasará en la política, en ciencia, en economía,en la vida de cada uno de nosotros? Cuando hacemos una elección entre varias opciones, debemos preguntarnos no sólo sobre cómo superar la amenaza inmediata, sino también sobre el mundo en el que viviremos cuando termine la tormenta. 

 

Finalmente, el mundo entenderá que lo principal es el amor y la comprensión, y no se encontrarán fallas entre ellos en las pequeñeces. La cooperación de los ciudadanos es necesario, confiar en la ciencia, las instituciones públicas y los medios de comunicación, que en los últimos años ha sido destruida deliberadamente por algún sector de la sociedad. 

 

Sin embargo, durante períodos extraordinarios de tiempo, el largo proceso de restauración de la confianza también debe acortarse, y las nuevas tecnologías deben usarse para aumentar el poder de los ciudadanos sobre sí mismos. La humanidad debe tomar una decisión. ¿Continuaremos en el camino del desacuerdo o nos embarcaremos en un camino de solidaridad global? Sin duda, este mundo tiene que cambiar. La vida es un compromiso.

 

Daniel Passerini pidió la renuncia a todo su gabinete y avanza con la restructuración.
La fórmula del oficialismo de la UCR Río Negro: no a Milei, sí a Weretilneck.

Las Más Leídas

Cámara de Diputados bonaerense.
Patagonia: el grupo Trappa competirá por Chapelco contra Nico Repetto y otras cinco empresas
Axel Kicillof y Soledad Quereilhac
Mario Secco, intendente de Ensenada.
Eduardo Riera al frente de la Sociedad Rural de Jesús María. Lo acompaña su vice, Daniel de Giorgio.

También te puede interesar