En el medio del paro de médicos y médicas que sacudió al gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, una funcionaria porteña cursó invitaciones personales para los y las profesionales de la salud para un festejo virtual de fin de año con el jefe de Gobierno, el vicejefe Diego Santilli y el jefe de Gabinete, Felipe Miguel.
La misiva generó una ola de repudio en la Asociación de Médicos Municipales (AMM), que mantiene un diálogo aceitado con el PRO pero hace semanas que realiza jornadas de huelga en reclamo de un 42% de aumento salarial. La idea surgió de la secretaria de Transformación Cultural, Paula Uhalde.
Los médicos y las médicas estatales salieron a exhibir su “asombro” y aclarar su “repudio” a la convocatoria para que “…compartamos un encuentro virtual exclusivo junto a Horacio, Diego, Felipe y todo tu equipo para decir ¡gracias! por tu compromiso de este año…”.
“No resulta menor el hecho que dicha invitación sea cursada durante un día de lucha expresado en un paro de actividades con altísimo acatamiento como medida gremial en reclamo de una recomposición salarial acorde al detrimento inflacionario de nuestros salarios durante el último año”, cuestionó la AMM.
“No nos sometan a un recorte salarial y al mismo tiempo nos hagan sentir humillados en una convocatoria virtual para dar gracias”, agregó. “Pedimos hechos, no palabras”, remató en una carta dirigida a Rodríguez Larreta, Santilli y Miguel.
Las médicas y los médicos realizan paros desde noviembre porque consideran “insuficiente” el incremento del 15% que ofertó la Ciudad. En la última reunión paritaria, el Gobierno propuso un incremento del 15% en tres tramos. El plantel médico municipal contaba con un aumento del 8% desde marzo, aunque es de carácter no remunerativo, es decir, no está incluido en el sueldo. Es una especie de bono que, ahora, quiere encuadrarlo dentro de la escala salarial y cerrar un incremento del orden del 42%.
En paralelo, el gobierno propuso aumentos escalonados del 5% para llegar a un 23% total, junto a un bono de $10 mil a cobrar en enero y febrero. “Todo esto quedó lejos”, explican desde la AMM, que llevó la propuesta oficial a los hospitales públicos y encontró un “no” rotundo como respuesta.