Eduardo Wado De Pedro, y Horacio Rodríguez Larreta, se reunieron por más de 40 minutos en la Casa Rosada este lunes. Tras su reunión con el presidente Alberto Fernández, el jefe de Gobierno porteño fue convocado a Balcarce 50 y se fue con una invitación: el ministro del Interior le pidió que asista este martes a la reunión del presidente Alberto Fernández con gobernadores, donde se anunciará la suspensión del Pacto Fiscal durante un año.
Rodríguez Larreta confirmó su presencia y, al igual que sus pares peronistas y radicales, destacó la decisión del Gobierno en torno a frenar la rebaja de la alícuota de Ingresos Brutos y Sellos. El gobierno porteño puso 8.000 millones de pesos este 2019 y para 2020 deberá desembolsar 20.000 millones para paliar la reducción del cobro de ambos impuestos.
Tanto en la Casa Rosada como en la Jefatura de Gobierno coinciden en que el encuentro fue “cordial” y la charla “respetuosa”. Se trató de un mano a mano en el que De Pedro iba con un objetivo reclamado por Fernández: garantizar la presencia de Larreta en la foto con los gobernadores de este martes. Por estas horas, la suspensión al Pacto Fiscal, impulsado por Mauricio Macri en 2017, implicaría el freno de la rebaja en materia impositiva, pero se mantendría tal cual el proceso de traspaso de los servicios de electricidad de la Nación a las provincias.
Horas antes, el propio Fernández recibió a los tres gobernadores radicales para adelantarles que suspendería el Consenso Fiscal e invitarlos al acto en que estarán los mandatarios de las 23 provincias y la Ciudad de Buenos Aires.
En la primera semana de los nuevos gobiernos, la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, apuntaron contra la Ciudad y Rodríguez Larreta. Sin nombrarlo, ambos aludieron al único distrito que gobierna el PRO y la situación de comodidad y beneficios de la que gozó durante los cuatros años de Macri en la Casa Rosada.
El gobernador bonaerense aprovechó su acto de jura para adelantar que le pedirá a Fernández que se vuelva atrás con la creación del ente regulador de la electricidad. En tanto, Cristina cuestionó la diferencia presupuestaria entre el municipio de La Matanza y la Ciudad y alentó los fantasmas en torno a un replanteo en torno a la coparticipación federal. En el larretismo se prendió una luz de alarma por esas declaraciones.
Curiosamente, ninguno de esos temas se tocó en la charla, distendida y cordial, entre el Presidente y Rodríguez Larreta. La única advertencia de Fernández para el jefe de Gobierno fue que no permitiría más transferencias de tierras federales hacia la Ciudad, un mecanismo de cesión de terrenos que Macri avaló durante su estadía en Balcarce 50.
