Los empleados de la Unidad Ejecutora Provincial (UEP) organismo que depende de la Dirección de Cultura y Educación bonaerense, iniciaron un proceso de asamblea permanente ante la posibilidad inminente de pérdida de puestos de trabajo.
Se trata de 380 contratos que culminarán el próximo 31 de diciembre y que hasta la fecha no se sabe si serán renovados. Ante la falta de información oficial, los trabajadores involucrados decidieron iniciar un plan de lucha que comprende la permanencia pacífica en el edificio donde funciona la UEP, de la calle 8 entre 45 y 46 de la ciudad de La Plata.
De acuerdo a la información suministrada por los delegados gremiales del organismo, los empleados solo tuvieron comunicación del asesor de la Unidad, Pablo Villareal, quien informó que “no todos los contratos se iban a renovar” y que en las próximas horas se enviarían notificaciones individuales “comunicando la continuidad laboral o no de cada uno”.
De acuerdo a las fuentes gremiales, el alerta se inició cuando el ex director provincial de Infraestructura, Joaquín Gándara, solicitó a los coordinadores de su área una lista para despedir a “algunos” contratados.
Luego de ello, los representantes de los empleados de la UEP intentaron varios encuentros con los directivos, que fue negado y suspendido en varias instancias.
La UEP es un organismo que funciona desde hace más de 20 años, aunque, y según denuncian sus empleados, siempre fue en situaciones de precaridad laboral.
Por ese motivo, la planta de contratados es tan importante, y se trata en la mayoría de los casos de antigüedades de muchos años.