“Alejandro Granados dio números sueltos y reconoció que hay casi 3.000 presos en comisarías a pesar que la Corte Suprema de la Provincia se lo prohíbe” disparó Leonor Granados sobre el rol de su hermano, Alejandro Granados, al frente del ministerio de Seguridad.
La crítica hacia la gestión de su hermano sin embargo tiene otro matiz. Se da en un contexto político en la que la Senadora tomó la decisión de ser candidata a intendenta por el Frente Renovador en el municipio gobernado por Granados, Alejandro, desde el menemismo hasta la fecha.
Leonor Granados llegó a la lista del FpV que le permitió entrar al Senado en el 2011 gracias a su apellido y a los vínculos familiares. De hecho juró por Néstor Kirchner. Dijo su cuñada, la diputada nacional Dulce Granados y figura principal en la línea sucesoria de la intendencia de Ezeiza por el PJ, que Leonor llegó a la lista gracias a su hermano.
Sin embargo cuando Leonor decidió dar el salto al Frente Renovador la relación se cortó. La propia legisladora confió al momento de fotografiarse con Sergio Massa que el vínculo familiar hacía tiempo que estaba roto.
Como fuera, esas diferencias se profundizaron en el último tiempo y aceleraron los tiempos políticos en el distrito de la Tercera. Granados encabezará este lunes la charla “Seguridad y Narcotráfico” junto al presidente de su bloque, Jorge D’Onofrio y el diputado, Ramiro Gutiérrez.
De la visita del ministro de Seguridad, su propia hermana explicó que “nos dio sólo cuarenta minutos para hablar de cómo la Provincia va a trabajar en la seguridad en todo el 2015. El ministro dijo que se tenía que ir porque otro tenía otro compromiso”.
¿Acompañamiento verdadero?
Pese a sus intenciones de consagrarse como candidata del Frente Renovador, en el propio bloque del FR sobre no hay tantas certezas ni respaldo a la propia Granados.
Un síntoma que se vio en la última sesión del Senado cuando el FpV, durante la discusión de un proyecto de declaración de Granados. El bloque del FpV pidió la votación a mano alzada y pese a ser la segunda minoría ganó. Al momento de votar, tanto el senador massista, Baldomero Álvarez de Olivera como su par, Alfonso Coll Areco se habían levantado de sus bancas restándole dos números al Frente Renovador.
Pese a todo, Granados irá por la intendencia para pelearle a su propia familia la conducción del municipio. Por ello una de sus estrategias será desgastar la gestión del ministro de Seguridad.